Opinión

Los funcionarios, víctimas de la ideología de género

Sepa usted, estimado lector, que si no es capaz de «reconocer y deconstruir los roles tradicionales masculinos» o «reconocer distintas realidades y características en torno a la diversidad sexogenérica» es que carece de formación en Igualdad y No discriminación. O sea, que tiene usted todas las papeletas para ser declarado un machista redomado. El Gobierno socialcomunista va a empezar a formar a los funcionarios y empleados públicos. El documento, elaborado por los ministerios de Hacienda, Igualdad y Derechos Sociales, se dirige principalmente a los funcionarios de la Administración General del Estado, aunque se abre también a la participación del personal de las comunidades autónomas para «desarrollar unas administraciones públicas plurales, diversas, inclusivas, abiertas y participativas». Su objetivo es aumentar el número de «empleados públicos varones» interesados en participar en las actividades sobre igualdad de género y violencia de contra las mujeres «para aumentar la participación e implicación de los hombres en el cambio hacia modelos más igualitarios».

Los programas se impartirán en modalidad presencial o telemática para «sensibilizar sobre el papel del feminismo en las administraciones», «crear espacios libres de machismos» o «reconocer los elementos de las masculinidades y roles de género tradicionales». En suma, todo un lavado de cerebro orientado a imponer el código de la izquierda en materia de género. El colmo es que los funcionarios también serán aleccionados en cómo «aplicar los elementos básicos de las masculinidades igualitarias» y cómo ejercer «la paternidad responsable», para lo que se impartirán conocimientos de «gestión emocional» adaptados al «proceso de cambio».

Estamos en plena dictadura de la ideología de género y el Gobierno socialcomunista ha puesto en marcha una sectaria estrategia de adoctrinamiento que se traduce en un intervencionismo sin precedentes. Ahora serán los empleados públicos, pero si la izquierda sigue en el poder no habrá ámbito profesional ni estamento social que se libre de pasar por el aro. Si ahora ya resulta insoportable, imaginen ustedes lo que será si continúan en el Gobierno.