Desvaríos, obscenidades y mentiras

El dictador Sánchez ensoberbecido como nunca lanza al mercado de ocasión un inmundo panfleto escrito por su negra y mal titulado: Tierra Firme, porque oculta demasiadas arenas movedizas. Dicho psicópata se ríe hasta de su propia estafa. Tiene un sentido del humor grotesco, pues por ser inculto desconoce el humor sin fronteras. Confunde gracia con gracieta, e ironía con inmundicia. Sus incondicionales lo vitorearon en el evento y se creció, creyéndose Groucho Marx. Hacer el ridículo le excita y presume más que una hez en un solar. La presentación del libelo fue un compendio de desvaríos, obscenidades y mentiras. El autócrata nació para usurparle el trono al Rey e incluso a Dios. Está pidiendo a gritos que lo encierren en un psiquiátrico.

Sánchez no debe olvidar lo sucedido en México. Al presidente-dictador López Obrador se le ha alzado un falso general. Escuchen su vehemente discurso: «¿Se puede enjuiciar a una persona que juró cumplir y hacer cumplir todas y cada una de las leyes, comenzando por la Constitución, siendo semejante tirano el primero en agraviarla por sentirse un semidiós? Hablo en nombre del Ejército (?) en 2024, México volverá a ser libre, ya no habrá mexicanos de primera y de segunda, seremos iguales todos. Nos vendieron espejitos hace cinco años y compramos los espejitos. Y se adueñaron de las instituciones y sí, les digo, frente a la tiranía, cualquier sistema de lucha es legítimo. ¡Pues claro que se puede enjuiciar a una persona que nos mintió a todos! ¡Y encarcelarlo! ¡Viva México libre!». Sobra decir que al impostor le patinan las meninges. Pero haría buenas migas con el psicópata, experto en golpes de Estado.

Obscenidad es decir que «la amnistía es un noble objetivo», regalar Pamplona a los etarras de Bildu y arrodillarse ante Puigdemont en la Eurocámara cuando el prófugo te amenaza por haberle traicionado con la monserga del catalán. Obsceno eres tú, Perro Sanxe, que ladras entre abucheos mientras indignas a Manfred Weber, eurodiputado teutón que desmontará tu ilegal amnistía por haberle ofendido citando el Tercer Reich. Cada vez que vas de embajador español fracasas. Argelia, Marruecos, Israel y la UE lo atestiguan. «No se puede ir por el mundo llamando nazi a la gente», dice Cristina Losada. Eres un gañán, igual que tu portavoz, Patxi López, al que le preguntaron sobre el principio de Arquímedes y repuso: «¿Cuál de ellos?».

Las mentiras son el lenguaje habitual del sanchismo y no cuelan en Bruselas. El déspota Sánchez ha perdido el tren de la dictadura. Amnestie kaputt, afirma Weber.