Opinión

El Barça de Laporta, entre la exaltación independentista y la xenofobia

La oferta de descuento del 25% en las entradas para el partido que el próximo fin de semana disputará el Barça de Joan Laporta contra el Girona, revelación de la presente Liga, presenta un aspecto sorprendente y polémico por discriminatorio y xenófobo: sólo podrán acogerse a la oferta los «residentes en Cataluña». O sea, que cualquiera que pretenda presenciar el partido y resida en otro territorio de España distinto al catalán será penalizado de facto.

Con independencia de que la campaña del Barça sea todo un disparate desde un punto de vista meramente comercial -no está el club azulgrana para hacerle muchos feos a sus simpatizantes que no residen en Cataluña-, el descuento tal vez busque convertir el encuentro entre dos partidos catalanes en un espectáculo de exaltación independentista, en un aquelarre ‘patriótico’. La discriminación a sus aficionados no catalanes es tan evidente como torpe, porque lo que se vende como un descuento es, en realidad, una penalización al español que viene de fuera dd Cataluña, lo que raya con la xenofobia.

No estamos ante un descuento para jóvenes o mayores, práctica al uso que no presenta -todo lo contrario- mayor inconveniente, sino ante una medida que vulnera el principio más básico de igualdad y lo hace, además, enarbolando la bandera de un nacionalismo muy cateto. El fútbol es un espectáculo universal que el Barça se empeña en limitar torpemente, al convertir el club en patrimonio exclusivo de Cataluña y para Cataluña. Ganas de ponerse barreras. Es una patochada de lo más paleta ofrecer descuentos del 25% a los residentes en Cataluña, porque lo que se traslada con esta ‘oferta’ es que unos pocos serán penalizados con un 25% por no ser catalanes. Y eso, se mire por donde se mire, es discriminatorio. Por decirlo más claro: da toda la sensación de lo que se pretende, más que beneficiar a los residentes en Cataluña, es castigar a los ‘españoles’. Por cierto, si los residentes en Cataluña no llenan el campo ni con descuentos, ya dirá Laporta que gana con ‘ofertas’ como esta.