Algunos quieren que Mazón se vaya para que Sánchez se quede

Las pesquisas llevadas a cabo por la juez de Catarroja que investiga la tragedia de la DANA forman parte de una instrucción que no ha concluido y que, en cualquier caso, forma parte de un proceso que se encuentra en una fase inicial, pero que ha servido para que la izquierda y sus terminales mediáticas -con el apoyo de otras terminales que presumen de combatividad frente al sanchismo- aprovechen la circunstancia para reclamar la dimisión de Carlos Mazón, presidente de la Generalitat Valenciana. Cada cual, faltaría más, es muy libre de reclamar la renuncia de quien considere oportuno, pero si el argumento es que la investigación de la juez de Catarroja apunta directamente a Mazón, habrá que convenir que algunos confunden burdamente el deseo con la realidad. No se trata de salir en defensa del presidente del Gobierno valenciano, sino de salir en defensa de una verdad que, sin duda, es bastante menos absoluta que algunos titulares que, del brazo de una juez, piden que Mazón se vaya sin darle siquiera el beneficio de la duda.
Sorprende, en todo caso, que al amparo de una supuesta independencia y objetividad algunos contribuyan de forma tan palmaria a sustentar el relato de la izquierda y a salir en defensa de las tesis del Gobierno, que no ha hecho otra cosa en los últimos meses que intentar sacar rédito político de una tragedia que ha constado la vida a más de dos centenares de personas. Cada cual, por supuesto, es muy libre de posicionarse como crea conveniente, pero justificar la petición para que Mazón se vaya en el discutible auto de una juez parece un pelín forzado, salvo que el auto no sea más que un pretexto y se pida abiertamente la cabeza política de Mazón por otras razones de naturaleza inconfesables. Insistimos: máximo respeto a las opiniones ajenas, pero la nuestra es que algunos quieren que Mazón se vaya para que Sánchez se quede.