96 municipios de Jaén se apuntan al compromiso del «Orgullo verde» para reciclar vidrio

El reto ciudadano en el que competirán las ciudades premiará a las que más tasa de reciclaje consiga

Un total de 96 ayuntamientos jienenses podrán participar en la campaña Orgullo verde encaminada a sensibilizar y reconocer  sensibilización al municipio con mayor compromiso con el reciclaje de vidrio y la sostenibilidad.

La iniciativa parte de la unión de distintas entidades y administraciones apuestan para que los jienenses también sean reconocidos por su compromiso con la economía circular de un material, el vidrio, que es infinitamente circular.

La campaña se desarrollará desde el 7 hasta el 21 de diciembre en los 96 municipios que conforman la Diputación de Jaén, para concienciar a todos sus habitantes sobre la importancia de formar parte de la cadena de reciclaje de vidrio en sus municipios y en la provincia en general.

Reto ciudadano

Los impulsores de esta propuesta de concienciación en torno a la economía circular tienen como objetivo «seguir mejorando la conservación de su entorno natural y elevar las tasas de reciclaje de envases de vidrio».

Entre las entidades participantes en esta propuesta se encuentra la Junta de Andalucía, la Federación Andaluza de Municipios y Provincias y Ecovidrio, además de ponerse en marcha contando también con la colaboración con la Diputación de Jaén.

Los responsables de este reto ciudadanos por ver quién es más circular con el vidrio destacan que el fin último es el de «concienciar a los jiennenses sobre la importancia de formar parte de la cadena de reciclaje de vidrio en sus municipios y en la provincia en general, y así seguir mejorando la conservación de su entorno natural y elevar las tasas de reciclaje de envases de vidrio».

Orgullo verde con premio

Los consistorios serán los encargados de compartir y transmitir a sus vecinos la campaña, tanto a través de sus medios y plataformas, como con cartelería para informar de ésta en edificios públicos, zonas emblemáticas y espacios publicitarios municipales cuyo objetivo es llegar y sensibilizar al mayor número de ciudadanos.

Este desafío ecológico tiene premio por participar y crear la máxima involucración de los municipios y de sus vecinos para visibilizar al más  comprometido con el reciclado, y a su vez, contar con el honor de «poder lucir el mayor Orgullo Verde de Jaén», según informan los organizadores del reto.

El municipio más implicado y que más difusión haga de la campaña, será el ganador. Habrá dos premios, uno para la ciudadanía, sorteándose entre los vecinos participantes 25 miniglús personalizados con la imagen de la campaña, y otro para el ayuntamiento ganador, otorgando un cheque de 2.000 euros para repartir entre las asociaciones medioambientales del municipio, con el fin ayudarlas en su desarrollo, para que crezcan y puedan alcanzar sus objetivos de sostenibilidad.

Los vecinos, con su ayuntamiento a la cabeza, podrán participar de manera individual o colectiva, sumando apoyos a la su candidatura y promocionando la campaña a través de las redes sociales.

Además, la campaña Orgullo Verde coincidirá en algunas fechas con la  recogida de la aceituna, un momento muy señalado e importante para la provincia de Jaén, «en el que el cuidado del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático son fundamentales y el reciclaje de los envases de vidrio es una forma directa de actuar contra ello», apunta desde la organización.

Beneficios del reciclado de vidrio

Es muy importante saber que el vidrio que se deposita en los contenedores se recicla al 100% y se utiliza para la fabricación de nuevos envases, en un ciclo sin fin y sin perder las propiedades originales. De este modo, si hacemos el gesto de dejarlo en el contenedor apropiado, los iglús, evitamos el crecimiento de los vertederos.

La concienciación ciudadana es un elemento clave en la lucha contra el cambio climático, ya que, al usar calcín – vidrio reciclado – en la fabricación de nuevos envases se evita la extracción de materias primas de la naturaleza, evitando la erosión de los suelos y la deforestación de nuestro entorno. Además, se minimiza la emisión de CO2 en el proceso de fabricación y se ahorra energía.