Mundial Qatar 2022
Mundial de Qatar 2022

El mal ganar de Argentina

Argentina se proclamó campeona del mundo y la celebración fue por todo lo alto desde el primer minuto en el que el árbitro pitó el final del encuentro. No obstante, las formas a la hora de ganar son muy importantes y ayer, la Albiceleste dejó mucho que desear a la hora de festejar el tercer Mundial de su historia. Tan importantes es saber ganar como saber perder, pero los argentinos, quizás por la euforia de lograr el título más importante para un futbolista o, quién sabe si por otros motivos, dibujaron una celebración algo empañada por sus idas y venidas con rivales y periodistas.

Todo comenzó con la ceremonia de entrega de premios individuales cuando el ‘Dibu’ Martínez realizó un gesto algo obsceno con el trofeo que le acreditaba como mejor portero del torneo. El portero del Aston Villa se llevó dicho obsequio a sus partes mientras miraba a la afición. Cabe destacar que el arquero de 30 años ya había tenido otros episodios durante este Mundial.

Después, continuaron los malos modales por parte de los jugadores argentinos dentro del vestuario donde, en vez de festejarlo cantando y gritando, comenzaron a acordarse del rival. En primer lugar, el propio guardameta pidió un minuto de silencio por Mbappé ya que «estaba muerto» (cabe recordar que le endosó un hat-trick para la historia) y, poco más tarde, Agüero, durante un directo de Instagram llamó a Camavinga «carapinga», todo ello sin venir a cuento cuando el jugador del Real Madrid había sido uno de los artífices de la remontada ‘blue’.

«Insultos a los periodistas»

Luego, en otro directo de Instagram, esta vez de Nicolás Otamendi, aparecía el central junto a Rodrigo De Paul, que tantas críticas había recibido durante este Mundial y también antes de él. El futbolista del Atlético de Madrid quiso acordarse de todos ellos: «Y todos los que dudaron, chúpenme bien la pija, me tiraron de todos lados y no me voltearon, chúpenme todos la pija, puto», decía.

En última instancia, y ya pasada la hora de festejo dentro del vestuario, los jugadores argentinos salieron del mismo para continuar la fiesta fuera del estadio. En la zona mixta, lugar donde esperaban cientos de periodistas, la selección argentina salía realizando una conga con Messi liderándola entre insultos a los periodistas: «Y no me importa lo que digan estos putos periodistas…» cantaban los jugadores mientras los propios profesionales de la comunicación inmortalizaban el momento.