Range Rover: lo que el ojo no ve

El dúo formado por Jaguar y Land Rover sigue dando que hablar. Después del XF o del Evoque, ahora le llega el turno al restyling del Range Rover. Nos queda la sensación de que se podría haber hecho algo más, y es que las modificaciones de este gran todoterreno afectan fundamentalmente a todo lo que no se ve. Es un coche mejor, pero a primera vista, que queramos o no es lo que enamora, apenas hay diferencias.

No obstante, eso no es impedimento para que el Range Rover de un paso al frente y presente unas mejores cartas para enfrentarse a sus rivales más potentes, que también repasamos en este artículo. Así es el nuevo Range Rover.

Renovación de motores, lo principal del Range Rover

La eficiencia por bandera. Esto es lo que ha buscado Land Rover para su Range Rover 2016, cuyos motores buscan cumplir con la exigente normativa Euro 6. La mecánica estrella para ello sigue siendo la híbrida de la versión SDV6, que ahora gasta 6,2 l/100 km, mejorando en dos décimas la cifra precedente. La potencia de este propulsor se mantiene en 340 CV.

En diesel, el Range Rover sigue ofertando las variantes V6 y V8, con 258 y 340 CV respectivamente. En este caso las cifras de consumo y emisiones mejoran un 4%. Y para los que prefieran la gasolina, adiós a la eficiencia. Pero disfrutarán de un bestial motor de 5 litros V8 con 510 CV de potencia.