Probamos el Kia Optima Emotion 1.7 CRDi automático

Reconozco que el Kia Optima es uno de esos coches que tenía ganas de probar. Ya había tenido la oportunidad de ponerme al volante de la anterior generación, que me sorprendió para bien en todos los aspectos. Mis expectativas con la nueva eran altas, por tanto. Y no puedo hacer otra cosa que confirmaros que no solo las ha cumplido, sino que se han visto superadas. El Kia Optima es un cochazo con mayúsculas cuyo único problema de cara al público es que no es alemán, teniendo en cuenta el segmento del que hablamos.

Diseño

El Kia Optima es una apuesta diferente en lo que a diseño se refiere. Alejado de la sobriedad típica de las berlinas alemanas, nos encontramos un coche cuyo frontal es su seña de identidad. Esto se da gracias a la parrilla ‘Tiger Nose’ típica de la marca, que se ve flanqueada por unos faros cuyo agresivo diseño aportan deportividad. También destacan unas luces antiniebla LED.

Si nos fijamos en la vista lateral, nos encontramos con un perfil tremendamente dinámico, cuya cintura presenta una línea ascendente que casa a la perfección con la caída del techo que desemboca en la zaga. Es complicado hacer un coche serio como debe ser una berlina y a la vez con un toque deportivo. Kia lo ha logrado con este Optima, que en la versión que nos cedieron para realizar esta prueba contaba además con unas espectaculares llantas de 18 pulgadas.

La zaga presenta un diseño de lo más musculoso, otorgando una presencia desde este ángulo que pocos coches en el mercado tienen. Las dimensiones de esta zona son bastante generosas, lo que no impide que estemos ante unas formas de lo más estilizadas. En resumen, un trabajo brillante el que han hecho los diseñadores de la marca coreana.

Interior

Donde te das cuenta del tipo de coche que es el Kia Optima es cuando accedes a su interior. Vale que nuestra unidad de pruebas iba cargada hasta los topes de todo lo que te puedas imaginar, pero eso no deja de ser una demostración de hasta dónde es capaz de llegar la marca coreana.

Antes de entrar en los detalles, vamos con lo que más sorprende del interior del Kia Optima, su espacio. Sabes que va a ser grande y cómodo, pero no te das cuenta de cuánto hasta que estás dentro de él. Y esto vale tanto para las plazas delanteras como para las traseras, donde incluso podemos tener calefacción en los propios asientos. Los delanteros, obviamente, también cuentan con este extra, además del de la ventilación y de dos memorias para guardar nuestra posición favorita. Destaca a su vez el cuero negro perforado que forraba los asientos de la versión del Optima que hemos probado, un síntoma más de la calidad que atesora este vehículo.

En cuanto a los materiales elegidos para el salpicadero y toda la zona frontal en general, destaca la calidad de los mismos, solo habiendo encontrado algún pequeño ‘pero’ con la presencia de algunos plásticos mejorables. Poca cosa, no obstante.

Otro de los puntos clave del Kia Optima es la capacidad del maletero. Al abrir el portón nos sorprenderemos del tamaño de lo que esconde, una zona de carga que homologa 510 litros, cifra más que suficiente para transportar todo lo que se te ocurra.

Motor y consumo

El motor que incorporaba el Kia Optima que hemos probado es el 1.7 CRDi diesel de 141 CV, que se asociaba a una caja de cambios de doble embrague automática con siete relaciones. Se me ocurren pocas combinaciones más acertadas para el tipo de coche que estamos hablando. Es cierto que quizás no estemos ante el propulsor más rápido de la historia, pero ofrece un rendimiento más que suficiente para lo que le vamos a demandar. Responde en todas y cada una de las situaciones que tendremos que afrontar a diario con una suavidad que solo merece aplausos.

Esta suavidad de la que hablamos también es aplicable al cambio, cuyas transiciones apenas se notan, ya sea funcionado de forma totalmente automática o engranando nosotros las marchas con las levas situadas tras el volante. Buen trabajo el de Kia en este apartado.

Además, podemos seleccionar entre tres modos de conducción, que son el ECO, el Normal y el Sport. El primero de ellos es el más recomendado para la ciudad, favoreciendo la eficiencia sobre el rendimiento. El segundo es el que utilizaremos en la mayoría de las ocasiones, mientras que el Sport nos permite exprimir al máximo una mecánica cuyo par máximo es de 340 Nm. Con estos tres modos también varía el comportamiento de la dirección, siendo el más preciso y eficaz el que ofrece en el modo deportivo.

En cuanto al consumo que tiene este motor, un servidor obtuvo una media de 7,3 l/100 km durante la semana que compartió con el coche. Es una cifra aceptable, aunque algo más elevada de lo que llega a ofrecer la competencia. Los motores coreanos siguen siendo algo más tragones de la cuenta.

Comportamiento

El comportamiento dinámico del Kia Optima ofrece todo lo que puedas esperar de él. El confort es lo que brilla por encima de todo, tal y como debe ser. Estamos ante una berlina familiar donde la comodidad de los ocupantes es el objetivo principal, con lo que no hubiese tenido sentido radicalizar el coche en este punto. De esta manera tenemos unas suspensiones cuyos reglajes no invitan a afrontar las carreteras con curvas como si de un rally se tratase, pero tampoco lo buscan. Si somos conscientes de las pocas limitaciones que tiene el Optima en este aspecto, no tendremos queja sobre él.

El Kia Optima es un auténtico devorador de kilómetros en autopistas y autovías. Es ahí donde se muestra como pez en el agua y donde da lo mejor de sí. Seremos capaces de conducir durante largos periodos de tiempo sin apenas notar un ápice de cansancio en nuestro cuerpo.

Otro de los puntos que merece elogio en el Kia Optima es el comportamiento que tiene a la hora de frenar. Por sus dimensiones, podríamos esperar ciertas inercias cuando nos toque efectuar alguna detención más severa de la cuenta. Pero no, nada más lejos de la realidad. Los frenos gozan de un tacto y de una eficacia que están fuera de toda duda. Sin duda, un gran trabajo el que se ha hecho en este aspecto.

En el apartado anterior hemos comentado los tres modos de conducción existentes. Estos afectan al comportamiento de la dirección, y debo reconocer que el único que me ha convencido del todo es el ‘Sport’. Los otros dos nos aportan una asistencia eléctrica que provoca un tacto de volante especialmente ligero, algo que se corrige casi por completo en el modo más deportivo.

Equipamiento

El equipamiento de la versión Emotion con el pack Luxury del Kia Optima es una auténtica locura. No encontrarás nada igual en el mercado por este precio -puede conseguirse desde algo menos de 35.000 euros-. Indicador de presión de los neumáticos, pantalla táctil multifunción de 8 pulgadas, asistente de arranque en pendiente, asistente de cambio involuntario de carril, lector de señales de tráfico, navegador, techo solar… ¡tiene de todo!

Me gustó especialmente la eficacia del asistente de aparcamiento, que nos ayudará a estacionar nuestro coche tanto en línea como en batería, algo especialmente importante en un vehículo de las dimensiones del Optima. Pude probar en todas las circunstancias posibles este mecanismo y os aseguro que funciona a las mil maravillas. Eso sí, ¡no deja de ser extraña la sensación de ver cómo el volante se mueve solo mientras tú controlas los pedales!

Mención aparte merece también el sistema de audio Harman Kardon que equipaba nuestra unidad de pruebas del Kia Optima. Los amantes de la buena música tienen en este extra un desembolso económico obligado que les permitirá ascender a un nivel auditivo que pocos coches en el mercado pueden ofrecer.

Conclusión y rivales

Lo decíamos al principio, y lo volvemos a repetir. El único problema que tiene el Kia Optima es que no es alemán. La mayoría de los compradores potenciales de una berlina ‘premium’ se decantan por modelos de firmas teutonas, pero os aseguramos que el Kia Optima no tiene nada que envidiar a estos, y todo por un precio más económico. Por el coste que tiene la unidad que hemos probado del Optima, apenas podrás optar a una berlina ‘pelada’ en lo que a equipamiento se refiere en Audi, BMW o Mercedes, por poner los tres ejemplos más claros.

Rivales

• Opel Insignia
• Skoda Superb
• Mazda 6
• Hyundai i40

Lo mejor

• Confort en marcha
• Espacio disponible
• Relación calidad-precio

Lo peor

• Algunos plásticos interiores
• Consumo de combustible mejorable