La DGT habla claro sobre esto que haces cuando conduces en verano: cuidado si no quieres que te multen

Conoce más sobre lo que te puede ocurrir si conduces como no debes.

  • Juan Carlos Acero
  • Desde 2014 especializado en la redacción de contenidos y el marketing. Me encanta escribir sobre automoción y el mundo de la empresa. En mi carrera como redactor he escrito para multitud de medios especializados.

La llegada del verano y los desplazamientos en los vehículos pasan a multiplicarse, de tal forma que se siguen una serie de costumbres que no se suelen producir el resto del año.

Ir en chanclas a todos los lados, que llevemos una gorra para que se haga menos daños el sol o que se lleve ropa ligera, son algunas de las características que hay que atender en la estación veraniega.

Eso sí, cuando se debe conducir, ¿se puede en chanclas, portar una gorra mientras se conduce o conducir sin camiseta en tu propio vehículo? Lo cierto es que la respuesta no es tan sencilla, puesto que la ley no va a prohibir este tipo de prácticas, pese a que a veces puedan ocasionar una multa.

¿Es posible conducir en chanclas?

Las chanclas son buenas para el verano, pero no para conducir.

Ya hemos dicho antes que no hay ley alguna que prohíba el conducir en chanclas como tal, pero si se llevan al volante es posible que sean susceptibles de que se imponga una sanción en base a los artículos siguientes del Reglamento General de Circulación:

Vamos a resumir lo que dice cada uno de los artículos:

Artículo 18.1: Quién conduce un vehículo tiene la obligación de que se mantenga su libertad de movimientos, así como un campo de visión adecuado y una atención permanente en la conducción.

Además, debe cuidar una posición adecuada y que la mantengan los otros pasajeros, así como colocar adecuadamente los objetos o animales que se transporten.

Artículo 17.1: Los conductores deben estar siempre en condiciones de mantener el control del vehículo.

Artículo 3.1: Es necesario conducir con la debida diligencia y precaución que sean necesarias para evitar daños, siempre buscando no poner en peligro al mismo conductor y a los ocupantes del coche y otros usuarios de la vía.

En este sentido, conducir con chanclas lo que haría sería limitar la capacidad de movimiento de los conductores, pudiendo provocar una multa que puede ser de cantidades de incluso 200 euros, aunque no va a implicar que se pierdan puntos en buena parte de los casos.

¿Y conducir sin camiseta?

Aquí podemos decir que la respuesta es parecida a la de conducir con chanclas, puesto que no hay ley que lo prohíba, pero la DGT piensa que conducir sin llevar camiseta es posible que sea peligroso para el conductor, puesto que como dice el artículo 3.1. del Reglamento General de Circulación que dice que se pueden producir lesiones o heridas si se activa el cinturón de seguridad.

La sanción en este caso puede llegar a ser de hasta cien euros, sin que haya retirada de puntos.

¿Y en el caso de que lleve gorra o pamela?

Aquí la respuesta es más fácil, pudiendo llevar cualquier ropa en la cabeza cuando se conduzca, siempre que se vayan a mantener las orejas destapadas y a la vista.

En el artículo 18.1 queda claro que cuando un conductor tiene sus orejas tapadas, la propia capacidad de oír, es posible que queden mermadas y no va a poder atender a todo lo que ocurra en la carretera.

¿Por qué se producen más accidentes en verano?

Siempre hay que prestar atención a la carretera.

Adquiere gran importancia entender los motivos que hay detrás de este fenómeno aumentan según crecen las temperaturas y las carreteras se llenan de viajeros y turistas.

Vamos a conocer más

Aumento del tráfico

Cuanto más tráfico, mayores probabilidades hay de que se produzcan siniestros. Las autopistas y carreteras secundarias notan un mayor tráfico, algo que crece exponencialmente en las zonas de playa y turísticas.

Este aumento del tráfico puede acabar con conductas de gran imprudencia, como adelantamientos peligrosos o excesos de velocidad, lo que acaba en un aumento de los accidentes.

Fatiga y distracciones

Se producen unos viajes más largos en carretera, por lo que es más fácil que se puedan producir fatiga. Hablamos de una de las causas más habituales de los accidentes de tráfico.

Conductas imprudentes y velocidad excesiva

La relajación es mayor en verano y se toman más comportamientos arriesgados al conducir. El exceso de velocidad, la conducción temeraria o el consumo de alcohol, es un comportamiento irresponsable que hace que aumente la probabilidad de sufrir un accidente de tráfico.

Condiciones climáticas

El clima atractivo es de las mayores ventajas que tiene el verano, siendo un factor que ayuda a los accidentes de tráfico.

Las altas temperaturas afectan al estado de las carreteras, deteriorándose el asfalto y apareciendo baches. Las tormentas de verano generan lluvias de gran intensidad, de tal forma que se reduce la visibilidad y se crean superficies resbaladizas.

Las condiciones adversas en lo climatológico hacen que aumente la probabilidad de que se produzcan accidentes, en especial cuando los conductores no adapten la conducción a las circunstancias.

En temporada de nevadas o lluvias, la gente está más atenta al volante que cuando el clima tiene una conducción más confortable. Este mayor confort lo podemos relacionar con lo que hablábamos antes de las chanclas o de conducir sin camiseta. Mejor no relajarse, ¿no?