BMW X6 M G-Power, un bendito exceso de gimnasio

Hay coches que no necesitan un extra de nada porque ya son lo suficientemente ‘brutos’. Es el caso del BMW X6 M, una bestia de 575 CV capaz de asustar al conductor más valiente. Sin embargo, en la naturaleza del ser humano está el ser inconformista. Y esto es algo que también podemos aplicar al mundo de la automoción, especialmente cuando se cruzan por medio empresas dedicadas al mundo de las preparaciones.

El supuesto del que os hablamos es precisamente el que nos ocupa hoy. De G-Power ya te habíamos hablado en alguna ocasión. El M4 y la Serie 7 de BMW ya han pasado por sus manos. Sin embargo, lo de hoy se va de madre. Hay que ser muy valiente para coger un X6 M y radicalizarlo más aún. El resultado, como no puede ser de otra forma, es brutal en todos los aspectos.

Estéticamente, el BMW X6 M no es un coche que necesite muchos cambios para asustar al mundo entero. De ahí que apenas se hayan sustituido las llantas por unas nuevas de 21 pulgadas. Por lo demás contaremos con todo lo que ha hecho famosa a la versión más deportiva de este mastodonte alemán, como son las entradas de aire y los flaps de la parte central, el difusor trasero y una aerodinámica optimizada.

G-Power ha decidido por tanto centrarse en el motor, el espectacular V8 de 4,4 litros que gracias a una actualización de la centralita electrónica y a la instalación del kit Bi-Tronik 5 V1 dispara su potencia hasta 659 CV, fijando además su par máximo en 830 Nm. El resultado es un SUV de más de 2 toneladas de peso que es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 3 segundos y de superar los 300 km/h de velocidad punta. Como sucede con el modelo original, este X6 M de G-Power transmite su potencia a las cuatro ruedas a través de una caja de cambios automática Steptronic de 8 relaciones.

De lo que no sabemos nada, y casi mejor no saberlo, es del consumo de este BMW X6 M. Aunque teniendo en cuenta que la versión original homologa un gasto de 11,1 l/100 km, la cifra puede llegar a ser escandalosa. No obstante, y ya con la manta liada a la cabeza que se suele decir, ¿qué más nos da 11 litros que 13 o 14? Al menos disfrutaremos de uno de los SUV más radicales que existen. De hecho, el X6 M convencional casi nos parece lento con su aceleración de 0 a 100 km/h en 4,2 segundos y su velocidad máxima -limitada electrónicamente- de 250 km/h.

A pesar de que no hay cambios en lo que a suspensiones, amortiguación o frenos se refiere, se espera que esta preparación del BMW X6 M haga disfrutar a quien lo compre de una agilidad idéntica a la del modelo de serie. A pesar de su tamaño y su peso, este devorador de kilómetros está pensado para tener un comportamiento dinámico exquisito. Parece difícil de creer que se logre esto, pero dicen quienes lo han conducido que BMW ha dado en el clavo…