Lotería de Navidad
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No es una errata: esta mujer ganó la lotería 4 veces en 17 años, y siempre compró los boletos en el mismo sitio

A comienzos de los 90 en Texas, varios premios de lotería en seguidilla fueron vinculados a una sola y afortunada mujer. Como era de esperar, el caso no tardó mucho en llegar a la prensa local. Y es que lo que parecía un patrón oculto de los sorteos y la reiteración geográfica dieron pie a múltiples análisis centrados en la «fortuna» de esta persona.

Además de captar la atención de periodistas, también tomó por sorpresa a matemáticos y responsables de la gestión del juego. Las razones que podrían explicar cómo esta persona ganó la lotería varias veces siguen siendo objeto de interpretación, sobre teniendo en cuenta que siempre compró los boletos en el mismo sitio.

¿Quién fue la afortunada mujer que ganó la lotería 4 veces en 17 años?

La protagonista de esta historia es Joan Ginther, una exprofesora de matemáticas que acabó acumulando una secuencia de premios difíciles de equiparar. Entre 1993 y 2010 consiguió cuatro premios superiores a los dos millones de dólares, todos dentro de la lotería de Texas.

El primero alcanzó los 5,4 millones de dólares; en 2006 sumó otros dos millones mediante un boleto de rasca y gana; en 2008 obtuvo tres millones y, en 2010, su mayor cifra: diez millones.

Dos de los boletos ganadores fueron adquiridos en la misma tienda del pequeño pueblo de Bishop, un patrón que llamó la atención tanto por la proximidad como por la reiteración del establecimiento.

A estos premios principales se añadieron 24 premios menores que configuraron un total superior a los 20 millones de dólares. Sus compras, siempre centradas en un radio muy específico, aumentaron el interés por su método de selección de billetes.

Cómo funcionan los rasca y gana y por qué generaron hipótesis sobre su estrategia

Los boletos de rasca y gana poseen una cantidad predeterminada de premios y una distribución fijada antes de su lanzamiento. Esta característica llevó a algunos especialistas a plantear que Joan Ginther pudo haber examinado los ciclos de venta de determinados juegos para identificar momentos en los que las probabilidades fueran más favorables.

Diversas investigaciones periodísticas señalaron que compraba grandes cantidades de billetes, una práctica que explicaría la acumulación de premios menores y el acceso a varios premios principales.

El Philadelphia Inquirer apuntó que podría haber gastado varios millones de dólares en estas compras, lo que habría incrementado sus posibilidades en un tipo de juego que no depende de sorteos en directo, sino de una matriz predefinida.

Aunque existe la teoría de que su formación en estadística pudo ayudarla a interpretar patrones, nunca confirmó ningún tipo de método. Su silencio ha sido una constante a lo largo del tiempo.

La probabilidad de que alguien gane la lotería múltiples veces

Los análisis matemáticos sobre su caso apuntaron cifras extremadamente bajas. En uno de los cálculos más citados, se mencionó una probabilidad aproximada de una entre 18 septillones, una estimación revisada después, pero que ayuda a dimensionar el debate.

Esta cifra ha sido mencionada por expertos que compararon su caso con otros episodios de victorias repetidas dentro del sistema estadounidense.

Responsables de la lotería estatal señalaron que cualquier patrón de premios relevantes se revisa internamente. Sin embargo, nunca se publicó un informe definitivo que indicara irregularidades. La repetición de premios fue interpretada en distintos sentidos: coincidencia estadística, estrategia de compra o combinación de ambas ideas.

Joan, una persona de perfil bajo y un traslado que marcó su última etapa

Joan Ginther mantuvo un perfil muy discreto durante toda su trayectoria. Tras sus premios más destacados se trasladó a Las Vegas, donde vivió alejada de entrevistas y de la actividad pública. En Bishop se la recuerda por algunas donaciones y cesiones de propiedades antes de marcharse.

Después de su último gran premio en 2010, no trascendieron más compras o victorias significativas. Falleció en abril de 2024 sin dejar explicaciones sobre su relación con la lotería, lo que mantuvo abiertas todas las interpretaciones sobre su extraordinaria secuencia de premios.

Su caso continúa apareciendo como un fantasma en informes, debates y  artículos de todo el mundo, sobre todo en España. Esto podría deberse al furor de la Lotería de Navidad y el anhelo de los participantes dar con una «estrategia mágica» para llevarse alguno de los premios.