Investigación
Menores

La Policía investiga la desaparición de dos menores de Madrid como un posible secuestro de su madre

Se llaman Jorge Ortiz Saldaña, de 1,22 metros de estatura e Izan Ortiz Saldaña, de 1,12. Tienen seis años, el pelo castaño, los ojos marrones y son gemelos. La Policía busca a estos dos menores y a su madre Verónica, desaparecidos desde el 15 de julio de este año. En el caso de la madre hay orden de busca y captura dictada, mientras que los menores se dan como desaparecidos, aunque estén con su madre.

El padre de los niños, José Manuel Ortiz, ha explicado a OKDIARIO que «todo comenzó con la separación hace año y medio. Luego recusó al juez que tenía que decidir las medidas cautelares. Le prohibieron que saliera de la Comunidad de Madrid con los niños y se fue. Tenía que ir a firmar todos los lunes en un juzgado de Pozuelo y la última vez fue el primer lunes de agosto y luego huyó y no ha vuelto».

Finalmente la Policía recibió una orden de búsqueda y captura del Juzgado para dar con el paradero de Verónica y poner a los niños bajo tutela judicial efectiva. Ahora se investiga a la mujer por posible secuestro parental. Un auto del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Pozuelo de Alarcón 11 de diciembre de 2020 dice que «se apercibe expresamente a doña Verónica Saldaña Rodríguez de que, o regresa de inmediato con sus hijos a la Comunidad de Madrid y permite que se reanude de inmediato el contacto paterno filial de estos con el padre o se acordará, también de inmediato, el cambio de guardia y custodia».

Posteriormente otro auto de 9 de julio de 2021 dejó sin efecto esta medida, pero se impuso la obligación a la madre de comparecer ante «este juzgado todos los lunes» y se le impuso «la prohibición a la investigada de salir de la localidad de Pozuelo de Alarcón tanto a ella como sus dos hijos menores de edad». Finalmente, otro juzgado de Pozuelo, en esta ocasión el número 3 de Instrucción acordó el 9 de agosto «deducir testimonio por un presunto quebrantamiento de medida cautelar, en concreto de la prohibición de salir de Pozuelo de Alarcón» y también acordaba «librar oficio a la Policía Nacional para que procedan a la inmediata localización y averiguación del paradero de los menores, debiendo dar cuenta a este juzgado de las gestiones llevadas a cabo a tal fin así como informar cuando sean hallados los menores del estado en el que ha sido encontrados y de quien se encontraban acompañados».

El padre de los niños, técnico informático en una empresa, explica que «nos separamos en febrero de 2020 y me pedía una pensión mayor que el sueldo que gano. No nos pusimos de acuerdo. Estuve viendo a los niños hasta el 2 de mayo, que me pidió volver y yo le dije que no. Me clavó unas tijeras en la mano, vino la Policía y me detuvieron. Me soltaron rápido porque no había nada y en juicio rápido me dieron visitas de miércoles a jueves y fines de semana alternos. Como a mí no me los daba iban mis padres a por ellos y también se negaba a entregarlos».

Verónica ha explicado a OKDIARIO que «yo no tengo ninguna orden notificada de busca y captura. Solo tengo una citación el día 18 y ahora estoy de baja. Así que el día 18 acudiré al juzgado». Y añade que «he denunciado a todos los medios que han difundido la imagen de mis hijos sin permiso.

La historia fue complicándose y comenzó el cruce de denuncias. «Primero me acusó de malos tratos, luego de abusar de uno de los niños, luego de abusar de los dos y como no quería que mi padre fuera también lo denunció a él. Yo he llegado a entregar mi teléfono móvil en el juzgado para que cotejasen los mensajes que ella aporta como prueba y están manipulados y los reales. Fabrica pruebas falsas y no atiende a requerimientos judiciales. Es todo un sinsentido». Verónica argumenta que «es imposible tener secuestrados a mis hijos, los llevo al colegio de manera totalmente normal».

Cartel con los menores que se buscan.

Mientras tanto, la madre, Verónica, que está en paro, subió un vídeo a una de sus redes sociales el pasado 9 de septiembre dando su versión de los hechos y justificando su salida de la Comunidad de Madrid porque «tenía principio de embolia pulmonar y tenía que ir a mi hospital de referencia en Tarragona», dice en el vídeo de 54 minutos que puede consultarse todavía y donde también relata que «uno de los niños tiene trastorno del espectro autista» y asegura que «el Juzgado puede notificarme lo que quiera en casa de mis abuelos, donde está mi residencia para notificaciones». El padre de los niños niega que los menores sean autistas:»Hay uno que tartamudea un poco cuando se pone nervioso pero nada más», dice.

Cuando la asociación SOSDesaparecidos publicó la alerta de los menores, la semana pasada, con la correspondiente denuncia interpuesta ante la Policía, explicaron: «Fue la propia madre la que nos llamó y nos pidió que quitásemos la alerta. Lo hicimos porque nos prometió que acudiría a un Juzgado o a la Policía para dar su paradero. Nos dijo que lo haría el jueves, luego que estaba de baja y lo haría el lunes, pero a día de hoy todavía no lo ha hecho que sepamos. Está claro que ha incumplido todo lo que ha ordenado el juez en su momento y nosotros sólo queremos que los niños aparezcan, estén localizados por un juez y luego el cruce de denuncias entre ellos será algo que tendrá que ver la Justicia», señala Joaquín Amils, presidente de SOSDesaparecidos.

El caso, por su similitud, recuerda al de Juana Rivas, la mujer que huyó con sus hijos desde Italia hasta ser detenida en España. La Policía Nacional especula con la posibilidad de que la mujer se encuentre fuera de Madrid, al norte de España e incluso recibiendo ayuda de alguna asociación.

Verónica argumenta que el padre de los niños «tiene una orden de alejamiento, un procedimiento por abusos y malos tratos y tres quebrantamientos de medidas cautelares y él «solo» me ha denunciado por secuestro».

El padre de los gemelos, sin embargo, aclara que solo hubo una denuncia por quebrantamiento y «fue archivada porque era falsa» y ahora ya pide la guardia y custodia total de los menores «porque está visto que la madre tiene algún problema, incluso llegó a recusar al juez de Pozuelo por amiguismo y no lo conozco de nada. Los niños llegaron a pasar una prueba de cámara Gessel, una prueba muy dura que se hace a niños víctimas de abusos y se concluyó que no había nada», exclama.