Investigación

La cajera de Rita Barberá aportó al PP municipal 38.000 euros en billetes

Carmen García Fuster no sólo es la mujer de confianza de Rita Barberá y la jefa y cajera de su grupo municipal, y por tanto presunto motor ejecutor de la recaudación y blanqueo de 50.000 euros de donativos de concejales y asesores municipales. Ha sido también donante destacada de sus finanzas municipales: le ha aportado personalmente 38.000 euros, curiosamente en efectivo, a pesar de que esa cuenta se nutría de aportaciones por transferencia de afiliados del Grupo Municipal del PP de Valencia.

La investigación ha probado ya que García Fuster aparece como autora de las tres únicas aportaciones en metálico de la tesorería del grupo municipal valenciano que ella misma dirigía y cuyas finanzas controlaba. En concreto, el 13 de mayo de 2011 entrega 28.500 euros en cash; el 20 de noviembre de 2013 otros 5.500 euros de la misma forma y, finalmente, el 11 de junio de 2014 ingresa también en efectivo otros 4.050. Esta concejala no dio ninguna explicación sobre estos abonos en cash: sólo dejó como indicación en los tres casos el rótulo «ingreso efectivo aportación».

Los investigadores la consideran por ello una persona que manejaba dinero en efectivo correspondiente al PP. Los informes sumariales lanzan su sospecha sobre dicha actuación: «El origen de esos fondos no ha sido explicado por dicha persona porque se ha acogido a su derecho a no declarar». La UCO considera que la operativa descrita, el blanqueo de los 50.000 euros a razón de donaciones de 1.000 por cada edil o asesor, es un sistema de «pitufeo, cuyo objetivo no es otro que evitar que las autoridades monetarias sospechen de ingresos en efectivo superiores, de tal forma que se distribuye la cantidad a ingresar».

Los informes sumariales concluyen que «la encargada de realizar la operativa era Carmen García Fuster, secretaria del grupo municipal del PP, y encargada de las cuentas del grupo municipal de ese partido, persona de absoluta confianza de la alcaldesa, Rita Barberá».

Por todo ello, y son datos puestos en conocimiento del Supremo al ser Rita Barberá aforada, los investigadores concluyen que «las diligencias que se han practicado revelan la existencia de una operativa de capitales orquestada desde el grupo municipal del PP, en la que aparece la persona aforada como una de las que efectúa la transferencia de 1.000 euros en las fechas indicadas, según la mecánica acordada».