Investigación

El juez descarta que la alcaldesa de Marbella tenga relación con la investigación policial a su marido

El instructor que investiga delitos relacionados con la mafia sueca descarta que Ángeles Muñoz haya tenido ningún tipo de participación en los hechos

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  • Alfonso Egea
  • Jefe de Investigación en OKDIARIO. Anteriormente fui responsable de la sección de Actualidad y Sucesos en Espejo Público, en Atresmedia. He publicado cuatro libros y actualmente colaboro en programas de televisión en Mediaset y en Telemadrid. Agradecido por tener el reconocimiento de la Policía Nacional de Madrid y la medalla al mérito de la Guardia Civil.

El año 2021 está siendo sin duda el año de puesta de largo de la mafia de origen sueco en nuestro país. Durante los últimos meses las operaciones policiales realizadas en solitario por investigadores españoles o coordinadas por Europol han colocado a los suecos como los delincuentes más activos y peligrosos de todas las organizaciones criminales que operan en España. En una de estas últimas operaciones los nombres de dos investigados llamaron la atención sobre el resto: Lars Broberg y su hijo Joakim Peter. Lars, investigado por presunto blanqueo, destacaba especialmente por estar casado con la alcaldesa de Marbella. OKDIARIO ha podido confirmar que todas las gestiones policiales y judiciales han llevado a la conclusión de que Ángeles Muñoz no ha tenido ningún tipo de relación con los hechos que se investigan.

En febrero de este año Policía Nacional y Guardia Civil, bajo el paraguas de la Audiencia Nacional, descargaban un durísimo golpe contra el crimen organizado de origen sueco establecido en la Costa del Sol. Los investigadores habían encontrado una línea de trabajo policial en una red dedicada al tráfico ilegal de un fármaco sustituto de la heroína. La operación sirvió para sacar del mercado negro 55.000 pastillas cuya dificultad para ser adquirida en el mercado legal les hacía alcanzar precios de oro para los traficantes ilegales. El problema del fármaco en cuestión es que su consumo fuera de la supervisión de un médico puede ser extremadamente contraproducente e incluso, en caso de sobredosis, provocar la muerte de quien lo consuma. De ahí la importancia de la investigación policial de orden internacional.

La operación del mes de febrero acabó con nueve personas detenidas y varios registros en Marbella, pero un nombre rápidamente llamó la atención de los medios de comunicación primero locales y luego de ámbito nacional. Los investigadores llegaron a las puertas de una consultora inmobiliaria en un centro comercial de Marbella. Los agentes solicitaron la presencia inmediata del propietario para llevar a cabo un registro. El hombre se presentó en compañía de su abogado, colaboró y se marchó a su domicilio sin pasar por comisaría. Eso sí, quedó como investigado en la causa. El empresario era Lars Broberg, el marido de Ángeles Muñoz, alcaldesa de Marbella.

Ni trato de favor ni recursos públicos

Ante esta particularidad, sumada al hecho de que en la operación también se detuvo a un antiguo escolta de la regidora, los investigadores pusieron la lupa en el Ayuntamiento de la ciudad y en su máxima autoridad. La conclusión meses después es que ni de manera voluntaria ni accidental la alcaldesa ha tenido relación alguna con el caso que afecta a su marido, no ha habido ni tratos de favor ni uso ilegal de los recursos municipales. La relación de Muñoz con el caso ahora mismo es accidental a través de su marido y el hijo de este.

Sin embargo, si la situación procesal de la alcaldesa mejoraba de cara a la opinión pública no lo hacía al mismo ritmo su situación personal. La condición de investigado de su marido, según la defensa de éste, se debe a una actividad desconocida para él usando medios de sus empresas, lo que derivaría en una suerte de blanqueo accidental. Eso lo tendrán que dirimir en la Audiencia Nacional, pero entre tanto apareció en escena otra persona vinculada de forma personal a la alcaldesa: el hijo de su marido, Joakim Peter Broberg.  El hijastro de la alcaldesa fue puesto en busca y captura por el juez, pero no se dio con él en Marbella, ni siquiera en territorio nacional. Joakim estaba en Brasil, donde al parecer tiene familia, y allí es donde espera ser extraditado a España para responder de acusaciones bastante más graves que las de su padre: tráfico de drogas y blanqueo de capitales.

Este pasado mes de agosto los investigadores dieron un golpe mucho más severo que el anterior a la banda de delincuentes suecos. El quid de la cuestión no era detectar la droga y quitársela en nuestro territorio. Lo realmente importante era saber cómo llegaba el medicamento sustitutivo de la heroína y otras sustancias objeto de negocio de esta banda hasta España. En estas pesquisas los investigadores se toparon con una organización criminal muy conocida en Suecia con más de 100 muertes en su haber. Tras más de dos años de trabajo los investigadores dieron con la clave: la mercancía llegaba por carretera a través de una empresa de mudanzas afincada en Málaga y Alicante.

A falta de que se dirima en qué queda la acusación contra el marido de la alcaldesa y su hijastro, los investigadores dan por resuelta la operación sin que haya aparecido ni un solo indicio incriminatorio contra la alcaldesa de Marbella, la ciudad en la que operaba una de las más peligrosas bandas criminales de Europa.