Joan Reñé ‘enchufó’ a familiares de los empresarios que le pagaban comisiones ilegales
El político convergente Joan Reñé i Huguet (hoy en la formación independentista Junts pel Sí) enchufó en la Diputación de Lérida a familiares de los empresarios que le pagaban comisiones ilegales.
El sindicato CGT presentó el pasado mes de junio una denuncia en los Juzgados en la que advierte que Reñé ha colocado irregularmente como interinos a una docena de personas vinculadas a su partido, Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), en puestos que la ley reserva para funcionarios.
Entre estos doce enchufados se encuentra Eduard Niubó Ena, que ha sido candidato de CDC al Ayuntamiento de Mollerussa. El presidente de la Diputación, Joan Reñé, le nombró jefe del negociado de Protocolo y Ceremonial en diciembre de 2013.
Reñé aprobó este nombramiento a dedo sin convocar el preceptivo proceso de selección, convirtiendo así en funcionario interino a un trabajador que tenía la condición de personal laboral no fijo, según la denuncia de CGT.
Pero Eduard Niubó no solo ha sido candidato del partido de Reñé y Artur Mas. Según las fuentes consultadas por Okdiario, es además primo-hermano de Esteban y Gonzalo Niubó Mir, cuyas empresas se encuentran en el centro de la trama de falsificación de facturas para «blanquear» el dinero destinado al pago de comisiones ilegales.
Como ha informado este diario, las constructoras Serboniu (cuyo administrador es Gonzalo Niubó) y M y J Grúas (cuyos consejeros han admitido ante notario haber pagado comisiones ilegales al presidente de la Diputación) han intercambiado en tan solo tres años facturas falsas que suman más de 800.000 euros. Este mecanismo serviría para dar una cobertura legal a las disposiciones de dinero en efectivo destinadas al pago de comisiones a Reñé y su partido, CDC.
Facturas por trabajos ficticios
Como presidente de la Diputación de Lérida y del Consell Comarcal del Pla d’Urgell, Reñé i Huguet ha adjudicado a Serboniu contratas públicas como las obras de ampliación del vertedero de Castellnou de Seana (1,5 millones de euros) o la construcción del nuevo consultorio médico de Linyola (625.189 euros).
Entre los doce enchufados en la Diputación también se encuentra Anna Maria Arqués Fondevilla, quien el 30 de septiembre de 2011 fue nombrada por Reñé interina a dedo, sin convocar el preceptivo proceso de provisión de plazas. Primero ocupó un puesto en el departamento de «recepción y acogida» de la Diputación y luego fue trasladada al servicio de Recursos Humanos.
Según las fuentes consultadas, Anna Maria Arqués es hermana del gerente de la empresa Benito Arnó e Hijos, a la que Joan Reñé ha adjudicado contratos como la ampliación del Instituto de Secundaria de Sant Vicenç de Montalt (por 5,1 millones de euros) o las obras para transformar el Centro de Estudios Porcinos (CEP) de Torrelameu en un Centro de Investigación Biomédica Avanzada (CREBA por sus siglas en catalán), por 230.142 euros.
A través de la sociedad Interiorismo y Reformas Profesionales, el empresario de 81 años Diego Garzón Uribe, considerado el «testaferro» de Joan Reñé, ha emitido desde 2010 facturas que suman 713.979 euros, dirigidas a la constructora Benito Arnó e Hijos.
Con frecuencia, era el departamento de administración de Enginyeria Inalba (dirigida por Esteban Niubó) el que daba instrucciones al testaferro para que su empresa emitiera a Benito Arnó facturas por trabajos ficticios.
La construcción de un «centro porcino»
De este modo, en junio de 2012, la empresa de los hermanos Niubó pidió a Diego Garzón que emitiera una factura a nombre de Benito Arnó e Hijos, por importe de 80.476 euros, por supuestos «trabajos de máquinas y personal en el primer trimestre de 2011», sin especificar de qué obra se trataba.
Eso sí, el correo electrónico ruega que «aparte de las facturas, nos deberíais mandar un certificado de estar al corriente de las obligaciones tributarias con Hacienda y la Seg. Social». Algo que indica que la factura iba a ser declarada como servicios de subcontrata en una adjudicación pública.
Entre las facturas falsas emitidas por el «testaferro» de Joan Reñé también se encuentra una emitida el 10 de octubre de 2013 por importe de 122.875 euros, por supuestos «trabajos de construcción en el centro porcino de Torrelameu». A pesar de que la Diputación adjudicó esta obra a Benito Arnó e Hijos, la factura fue emitida a nombre de una de las empresas de los hermanos Niubó y abonada con 12 talones de cuatro entidades financieras distintas.
La mayoría de estas facturas se corresponden a trabajos no realizados, ya que la empresa del «testaferro» Diego Garzón solo tiene dos empleados y tiene como fin social, entre otros, «la compra y venta mayorista de frutas». Pero servían para justificar, eso sí, las salidas de dinero en metálico destinadas al pago de comisiones, que se realizaba en la vivienda de la secretaria de Joan Reñé, en un centro contable de Barcelona y en las oficinas de dos de las constructoras implicadas.
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