Internacional

Rusia bombardea la acería Azovstal en Mariúpol donde mujeres y niños están al «borde del hambre”

  • Diego Buenosvinos
  • Especialista en periodismo de Salud en OKDIARIO; responsable de Comunicación y Prensa en el Colegio de Enfermería de León. Antes, redactor jefe en la Crónica el Mundo de León y colaborador en Onda Cero. Distinguido con la medalla de oro de la Diputación de León por la información y dedicación a la provincia y autor de libros como 'El arte de cuidar'.

Rusia ha inciado un nuevo bombardeo a la acería Azovstal en Mariúpol, último bastión de la ciudad portuaria y donde mujeres y niños se encuentran al «borde del hambre”, como ha denunciado la ministra ucraniana, Iryna Vereshchuk.  Según los datos que han emitido desde Kiev, se encuentran sitiados en esta fábrica cerca de 2.500 soldados y unas 1.000 civiles. La evacuación planeada desde Mariúpol para este sábado no se ha podido llevar a cabo por el inicio del ataque ruso.

Las nuevas evacuación debían comenzar al mediodía, según la ministra ucraniana, Iryna Vereshchuk, pero Rusia «está tratando de condenar no sólo a los soldados sino también a la población civil».

Sin embargo, dijo que la evacuación continuaría «si todo iba bien» y advirtió que las fuerzas rusas «podrían estar tratando de organizar su propio corredor para la evacuación a Rusia». Según los informes, cientos de residentes de Mariúpol han sido deportados a la fuerza a Rusia desde que comenzó la invasión.

«El enemigo está intentando acabar con la última resistencia de la ciudad», ha declarado el asesor presidencial Oleksei Arestovich en un mensaje de vídeo recogido por la agencia ucraniana UNN.

De momento no se tiene información del intento de evacuación programado para este mediodía por las autoridades ucranianas más allá de un comunicado emitido por las fuerzas separatistas prorrusas de Donetsk, que participan en el asedio, y que aseguran que la operación ha sido suspendida por culpa de los «nacionalistas ucranianos», según la nota recogida por la agencia TASS.

El presidente ruso, Vladimir Putin, rescindió el jueves una orden para atacar la acería para evitar un elevado número de pérdidas entre sus efectivos, según los analistas consultados por DPA.

La ciudad lleva asediada prácticamente desde el principio de la invasión, el 24 de febrero, y las autoridades de Kiev denuncian que al menos 20.000 personas han muerto desde entonces, de las cuales la mitad han sido enterradas en fosas comunes.

Unos 120.000 civiles permanecen en la ciudad sitiada, de acuerdo con las estimaciones del Gobierno de Ucrania.

Asimismo, el Estado mayor ucraniano ha confirmado una nueva ofensiva rusa a lo largo de todo el frente de la región del Donbás, en el este del país, donde se encuentran las autoproclamadas repúblicas separatistas de Donetsk y Lugansk.

Los combates se están concentrando en la ciudad de Sievierodonetsk (Lugansk), así como en Rubizhne, Popasna y Marinka, según un mensaje publicado en su cuenta de Telegram.