Internacional

La presidenta de Taiwán confirma la presencia de tropas estadounidenses para formar a su ejército

  • Diego Buenosvinos
  • Especialista en periodismo de Salud en OKDIARIO; responsable de Comunicación y Prensa en el Colegio de Enfermería de León. Antes, redactor jefe en la Crónica el Mundo de León y colaborador en Onda Cero. Distinguido con la medalla de oro de la Diputación de León por la información y dedicación a la provincia y autor de libros como 'El arte de cuidar'.

La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, aseguró que su país vive en constante amenaza con China y confirmó la presencia de un número reducido de tropas estadounidenses para ayudar a formar al ejército de la isla. La líder de taiwanesa señaló además que la isla es el centro de las crecientes tensiones entre Estados Unidos y China.

En este sentido adujo que la isla de 23 millones de personas «se esfuerza todos los días por proteger nuestra democracia y asegurar que nuestra gente tenga el tipo de libertad que se merece», aseguró Tsai Ing-wen.

En una entrevista con la cadena estadounidense CNN, la presidenta ensalzó los valores democráticos de su país y lo calificó como  «faro» de la democracia en la región que se enfrenta a su gigante vecino, cuya amenaza crece «cada día».

Este mes de octubre, desde el Pentágono se confirmó  la presencia de tropas estadounidenses en Taiwán, que Pekín considera parte integral de su territorio y una ofensa para ellos.

Hoy, las relaciones entre Taipei y Beijing se encuentran en su punto más bajo en décadas. A principios de este mes, las fuerzas armadas de China enviaron una cantidad récord de aviones de combate alrededor de Taiwán, mientras que los diplomáticos y los medios estatales advirtieron sobre una posible invasión a menos que la isla respetara la línea del Partido Comunista de China (PCCh).

Taiwán y China continental han sido gobernados por separado desde que los nacionalistas se retiraron a Taiwán al final de la guerra civil china hace más de 70 años. Taiwán es ahora una democracia floreciente, pero el gobernante Partido Comunista (PCCh) de China continental sigue considerando a la isla como una parte inseparable de su territorio, a pesar de que nunca la ha controlado.

Las demostraciones de fuerza son en parte el resultado del fortalecimiento de los lazos entre Taiwán y Estados Unidos bajo los presidentes Donald Trump y Joe Biden. Grandes ventas de armas y visitas de alto perfil de funcionarios estadounidenses han reforzado la posición internacional de Taiwán y han antagonizado a Beijing.

Tsai no quiso decir exactamente cuántos militares estadounidenses hay en la isla en la actualidad, pero aseveró que «no eran tantos como la gente pensaba». «Tenemos una amplia gama de cooperación con Estados Unidos con el objetivo de aumentar nuestra capacidad de defensa», adviritió.

Statu quo

El gobierno chino cree que Tsai y su partido, el Partido Democrático Progresista, están a favor de la independencia formal de Taiwán, a pesar de sus declaraciones públicas a favor del statu quo, un acuerdo por el cual Taiwán sigue siendo autónomo, sin una declaración oficial. Pero la presidencia de Tsai ha sido implacablemente atacada y ridiculizada desde el otro lado del Estrecho de Taiwán.

En los primeros cinco días de octubre, Beijing voló un total de 150 aviones de combate, bombarderos con capacidad nuclear, aviones antisubmarinos y aviones de control y alerta temprana aerotransportados hacia la Zona de Identificación de Defensa Aérea de Taiwán, según el Ministerio de Defensa de la isla.

Fue una demostración de fuerza cuidadosamente ejecutada por el gobierno chino: se desvió hacia áreas donde provocaría una respuesta de Taiwán, pero no ingresó al espacio aéreo de la isla.

Tsai señaló en la CNN que el Gobierno necesita adaptar mejor sus fuerzas armadas para defender una isla pequeña, en lugar de una fuerza de combate convencional.

«Tenemos un sistema que se hereda de China, que es un país muy diferente. La forma en que defiendes un gran territorio es diferente a la forma en que proteges una pequeña isla, así que tenemos que cambiar el pensamiento tradicional sobre cómo se debe estructurar un ejército», señaló la líder taiwanesa.