Internacional

Corredores para huir de la catástrofe humanitaria: «No hay gas ni agua ni luz y la comida ya escasea»

El Gobierno de Rusia ha declarado este martes un alto el fuego temporal y ha abierto varios corredores humanitarios para permitir la evacuación de civiles de la capital, Kiev, y ciudades como Chernigov, Járkov, Mariúpol y Sumy.

Los civiles ha empezado a ser evacuados este martes de la ciudad ucraniana de Sumy, cerca de la frontera con Rusia, en un nuevo intento de instaurar corredores humanitarios para que las personas asediadas por los bombardeos rusos puedan ponerse a salvo.

Los bombardeos aéreos contra esta ciudad situada a unos 350 km al noreste de Kiev, que escenario de violentos combates desde hace varios días, mataron a 21 personas -dos de ellas, niños- el lunes por la noche, según la fiscalía regional.

Horas después, el Ministerio ucraniano de Defensa acusó a Rusia de no respetar el corredor humanitario en Mariúpol, una ciudad portuaria estratégica del sur.

La situación se deteriora cada día y este martes, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, acusó a los países occidentales de incumplir sus «promesas».

La puesta en marcha de los corredores humanitarios centró este lunes la tercera ronda de negociaciones ruso-ucranianas del lunes, pero, en el terreno, las fuerzas rusas continúan desplegándose en torno a las grandes urbes, y bombardeándolas en algunos casos, según los responsables ucranianos.

El ejército ruso se concentra sobre todo en los frentes de Kiev, Mariúpol y Járkov, segunda ciudad del país, en el noreste, blanco de intensos bombardeos y tiros de misiles en los últimos días.

En Busha, a las puertas de Kiev, los habitantes también intentaban desesperadamente abandonar la ciudad. «Hay gente en cada apartamento, en cada casa. Lo más importante es hacer que se vayan los niños. Hay muchos niños y mujeres», dijo Anna a un periodista de la AFP.

«La ciudad está al borde de la catástrofe humanitaria. No hay ni gas ni agua ni electricidad y la comida empieza a escasear», contó. También se registraron intensos combates en la ciudad de Izium (este), aunque las tropas rusas se batieron en retirada, según el Estado Mayor ucraniano.

El Ministerio ucraniano de Defensa afirmó por su parte que el general ruso Vitali Guerassimov murió cerca de Járkov, una información que las autoridades rusas no confirmaron y que era imposible de verificar con una fuente independiente.

Según el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), obuses de artillería dañaron el domingo una instalación de investigación nuclear con fines médicos e industriales en Járkov, aunque no se detectó ninguna «consecuencia».