Argelia afirma que las relación con España sigue «estancada» y descarta cambios
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El ministro de Exteriores de Argelia, Ahmed Attaf, ha descartado cambios inmediatos en las relaciones diplomáticas y políticas con España, que siguen «estancadas» desde el aval del Gobierno de Pedro Sánchez al plan de autonomía marroquí para el Sáhara Occidental.
Attaf, que lidera la diplomacia argelina desde el mes de marzo, se ha referido este martes por primera vez en público a esta polémica, en una rueda de prensa en la que se le ha preguntado por los posibles cambios en las relaciones tras las últimas elecciones generales.
El ministro no anticipa ningún acercamiento, ya que considera que siguen vigentes las razones que llevaron a Argelia a llamar en marzo de 2022 a consultas a su embajador en Madrid y a romper unos meses más tarde, en junio de ese mismo año, el Tratado de Amistad con España.
El punto de inflexión fue una carta enviada por Sánchez al rey de Marruecos, Mohamed VI, y en la que cataloga el plan de autonomía para la antigua colonia española como «la base más seria, creíble y realista» sobre la que negociar, pese a que el Frente Polisario, aliado de Argelia, sigue reivindicando un referéndum de autodeterminación.
En el terreno económico, las exportaciones a Argelia cayeron un 45,9% en 2022 con respecto a 2021, pasando de 1.888 millones de euros a 1.021 millones, una tendencia que se mantenía en el arranque de 2023, según confirmaron fuentes del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.
En los tres primeros meses del año sólo se habían realizado exportaciones a este país desde España por valor de 30,2 millones de euros, frente a los 472,9 millones del mismo periodo en 2022, lo que supone una caída del 93,6%, con un impacto homogéneo en todos los sectores.
Ex ministro imputado
Por otra parte, la Fiscalía General de Suiza ha imputado este martes al ex ministro de Defensa argelino Jaled Nezar por presuntos crímenes contra la humanidad cometidos en el marco de la guerra civil en Argelia, que tuvo lugar entre 1992 y 2002.
El Ministerio Público de la Confederación ha indicado en un comunicado publicado en su página web que Nezar está acusado de violar las leyes de guerra por acciones cometidas entre 1992 y 1994, cuando era titular de la cartera de Defensa y miembro del Alto Consejo de Estado.
Así, ha manifestado que «como mínimo tuvo conocimiento y autorizó, coordinó e incitó la tortura y otros actos crueles, inhumanos o humillantes, las agresiones físicas y psicológicas, las detenciones arbitrarias y ejecuciones extrajudiciales», antes de afirmar que la imputación llega tras unas investigaciones «complejas».
La Fiscalía General suiza ha recordado que Nezar, jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, fue nombrado ministro de Defensa en 1990, tras lo que se hizo carga de las fuerzas de seguridad y posteriormente de los servicios secretos.
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