Cómo hacer un broche de libélula

Si te gusta poder crear tus propios complementos e incluso joyas, nada como recurrir a materiales como las cuentas o abalorios. Veamos a continuación, una guía de pasos en la que te explicamos cómo hacer un broche de libélula.

Las libélulas son uno de los insectos más antiguos de las que se dice que ya existían mucho antes de que los dinosaurios poblaran la tierra. Su cuerpo alargado y sus grandes alas hacen que destaquen de modo que podemos copiar su forma para crear un bonito broche que lucir en la solapa o que podemos también regalar a alguien especial.

Materiales

• Abalorios de Rocalla de color negro y marrón (de menos de 2 mm)
• Abalorios de Facetada de color topaz ( de 6 mm)
• Abalorios de Dagas de 3×11 mm y de 5×16 mm en color topaz y otro que sea más oscuro
• Hilo de nylon (de 0.25 mm de grosor)

Pasos para hacer un broche de libélula

1. Cortamos unos 50 cm de hilo de nylon y comenzamos pasando por el hilo siete rocallas de color negro que tenemos que llevar al centro.
2. A continuación, unimos los dos extremos del hilo y pasamos una cuenta de la facetada hasta el grupo de rocallas.
3. Ahora pasamos una piedra de rocalla por cada extremo de hilo. De este modo podremos tener la cabeza y la punta de la libélula.
4. Ahora tenemos que pasar dos abalorios de daga por cada extremo del hilo, combinando sus tamaños de modo que primero pasas una grande y luego una pequeña y así sucesivamente. De este modo, podremos hacer las alas.
5. Para el cuerpo, en uno de los extremos del hilo, enfilaremos dos abalorios de rocalla y cruzaremos el hilo con el otro extremo. Este paso lo tendremos que repetir cinco o seis veces en función de lo largo que queramos que sea el cuerpo de nuestra libélula.
6. A continuación, para darle algo de efecto a la cola, tendremos que enfilar dos abalorios de rocalla en color marrón. De nuevo cruzaremos los hilos por los extremos y repetimos el paso durante dos veces.
7. Para cerrar la libélula, solo tienes que enfilar una rocalla marrón y cruzas los hilos. Una vez hecho esto, juntas los hilos, haces un par de nudos y quemas los extremos con la ayuda de un mechero.
8. Para acabar tu manualidad y poder convertir tu libélula en un bonito broche, lo único que te quedará es coger un pequeño alfiler, o también puedes utilizar un imperdible, y lo pegas con un poco de silicona caliente al centro del cuerpo de la libélula. Dejas que se seque y ¡listo! tendrás un bonito broche que además contará con un brillo especial gracias a los abalorios.