Cómo cuidar el terciopelo paso a paso

El terciopelo es un tejido resistente y duradero, pero requiere un poco de cuidado para mantenerlo en su mejor forma. Si tienes accesorios o prendas como abrigos o vestido de esta tipo de tela, te explicamos a continuación, paso a paso y de manera fácil, cómo cuidar el terciopelo.

Qué es el terciopelo

El terciopelo es un tipo de tejido muy usado para la realización de todo tipo de prendas de vestir, así como para algunos muebles como por ejemplo, los sofás. Este, es un tejido que se caracteriza por su suavidad pero es además un tejido algo más grueso que el algodón por ejemplo.

Tradicionalmente, la fibra elegida para su elaboración era la seda, lo que hacía que el terciopelo fuera particularmente brillante y suave al tacto, pero también precioso y delicado (a menudo incluso enriquecido con láminas de oro o plata). Más tarde se introdujo el uso de algodón, lino, lana y mohair, lo que hizo que la tela fuera menos lujosa pero más resistente. Recientemente, también se han desarrollado terciopelos sintéticos (especialmente en poliéster, acetato, nylon y viscosa) pero todos ellos no dejan de ser algo delicados en lo que respecta a manchas o roturas debido al desgaste. Entonces, veamos qué hacer para cuidar el terciopelo.

Pasos para cuidar el terciopelo

La mayoría de terciopelo se puede lavar a máquina. Sin embargo, es importante verificar primero las etiquetas de cuidado. Algunas prendas de terciopelo como las chaquetas deben lavarse en seco. Mientras que la tela exterior está hecha de algodón y se puede lavar, los materiales internos que ayudan a la tela a mantener su forma pueden destruirse mediante el lavado. Esto no es algo que se puede revertir o reparar fácilmente.

De este modo, un cuidado especial ayudará a mantener el terciopelo más tiempo así que veamos qué pasos debemos dar:

1. Para telas de terciopelo oscuro, usa agua fría. Los colores blanco o pastel se pueden lavar en agua tibia. Siempre ordena la ropa correctamente y nunca laves el terciopelo con ninguna tela que produzca mucha pelusa, como toallas de felpa, vellón o fieltro. Ya te habrás dado cuenta con qué facilidad el terciopelo es capaz de agarrar pelusas.
2. Para mejores resultados, sacude la ropa después de sacarla de la lavadora
3. El terciopelo puede meterse en la secadora sin problema, pero eso sí, procura que sea durante un tiempo breve para eliminar las arrugas. Retira de la secadora cuando todavía esté mojado. Si ves que la prenda ha perdido ligeramente la forma, debes cepillar bien el terciopelo para que recupere su forma y suavidad.
4. Si en cambio dejas secar el terciopelo al aire, probablemente no tendrás que plancharlo. Si lo haces, asegúratee de planchar del revés. Es decir, por dentro del terciopelo. Coloca la plancha a temperatura media y coloca además un pañuelo o trozo de tela entre la plancha y la prenda a planchar.

Como eliminar pelusas en el terciopelo:

1. A veces ocurre que al lavar el terciopelo nos damos cuenta que nos hemos dejado un pañuelo o trozo de papel en un bolsillo, o puede ocurrir que veamos que ha cogido una pelusa de polvo o de algún otro tejido.
2. Para sacar todas las pelusas del terciopelo la clave está en cepillar bien la prenda cuando todavía está mojada y si está seca, la humedecemos un poco y cepillamos con un cepillo que esté completamente limpio.
3. Otro «truco» será pasar un rodillo para pelusas, o un poco de cinta adhesiva que puedes usar pegando sobre la pelusa, y dando luego un tirón.
4. Si todavía tiene pelusa, coloca la ropa en la lavadora, agrega 1/2 taza de vinagre blanco destilado y selecciona el ciclo de enjuague. El vinagre ayudará a las fibras de la tela a relajarse y «liberar» la pelusa. Coloca la prenda en la secadora con un par de paños de microfibra (la pelusa se pegará a los paños de microfibra) y la sacas cuando todavía esté ligeramente húmeda. Usa un cepillo para prendas o un rodillo adhesivo para eliminar los restos.

Por último si quieres mantener tus prendas de terciopelo como el primer día, asegúrate de limpiar el filtro de la secadora y verifica que no haya restos de tela en la lavadora.