La historia del turismo en España: Desde los romanos hasta hoy

La historia del turismo en España, tal y como se conoce hoy, surge en el siglo XIX, como una repercusión de la Revolución Industrial. A raíz de los cambios económicos y sociales, el país se sumó modestamente a las tendencias turísticas de otros países industrializados, en la que los viajes o desplazamientos tenían como propósito el ocio, descanso, cultura, negocios o las relaciones familiares.

Sin embargo, los orígenes del turismo se remontan a la antigua Roma, donde los más adinerados solían realizaban viajes de placer a las costas del Mediterráneo.

En la actualidad, el turismo es uno de los principales motores económicos del país. De hecho, cada año, este sector ofrece de manera, directa o indirecta, numerosas fuentes de trabajo a millones de personas que se traducen en importantes cifras de ganancias.

Orígenes del turismo en la antigüedad

El acto de viajar, más allá de la guerra o la supervivencia, se originó en las antiguas civilizaciones de Egipto, Grecia y Roma. En el antiguo Egipto, las personas viajaban por motivos religiosos o comerciales, mientras que las altas élites realizaban viajes de ocio para visitar templos o monumentos históricos. Los antiguos griegos, en cambio, viajaban para visitar los santuarios de sus dioses y participar en competencias deportivas como los Juegos Olímpicos.

Los romanos, que habían desarrollado una amplia red de caminos, no sólo viajaban por motivos religiosos y deportivos, sino también por placer y salud, ya que solían ir a termas y visitar las villas del imperio. En aquella época, los emperadores tomaban vacaciones para viajar a las costas del Mediterráneo, por lo que para algunos autores los verdaderos precursores del turismo de ocio fueron los romanos.

Los viajes de ocio en la edad moderna y contemporánea

En la era moderna, los viajes de ocio comenzaron a ser mucho más accesibles entre la clase media emergente, gracias a la invención del ferrocarril y los barcos de vapor.

El primer viaje grupal planeado en la historia tuvo lugar en 1841, de la mano de Thomas Cook, considerado “padre del turismo moderno”. Si bien tuvo repercusiones económicas, terminó siendo un éxito rotundo en lo que respecta a los paquetes turísticos. De hecho, en 1851, Cook fundó la primera agencia de viajes del mundo llamada, Thomas Cook and Son.

Durante la Segunda Guerra Mundial, el turismo se paralizó por completo en todo mundo hasta 1950, cuando comienza el llamado “boom turístico”, gracias a la invención de los aviones comerciales. Las aerolíneas permitieron que las personas viajaran a diferentes partes del mundo de forma rápida y relativamente asequible, impulsando así el turismo de masas.

El nuevo orden internacional, aunado a la estabilidad social y el desarrollo de la cultura del ocio en Occidente, propiciaron el crecimiento exponencial del turismo internacional como nunca antes en la historia. En esta época se comienza a legislar sobre el sector.

El turismo de masas (siglo XX hasta la actualidad)

El turismo de masas en España se desarrolla de forma tardía con respecto al resto de Europa. En aquel momento, el interés turístico se centraba en los balnearios y estaba destinada exclusivamente a la aristocracia y la emergente clase burguesa de las ciudades. Los balnearios más populares, como el de Panticosa o Mondariz, se convirtieron en pequeñas miniciudades con zonas residenciales, tiendas, iglesias… que permitieron hacer la estadía de las familias adineradas mucho más cómoda.

A inicios del siglo XX, los viajeros comenzaron a interesarse por las playas, sobre todo, porque los baños comenzaron a considerarse como una terapia saludable. La medicina de la época estaba convencida de que el agua de mar eran una fuente de salud y limpieza, por lo que los reyes comenzaron a viajar a la región de Cantabria para disfrutar de sus fresas aguas.

De esta manera, lugares como el Sardinero, en Santander, o La Concha, en San Sebastián, se convirtieron en los destinos predilectos para “veranear”. Durante la temporada estival, la afluencia de turistas en estas ciudades era cada vez mayor, principalmente, por la cantidad de servicios que ofrecían y la asistencia que recibían de las casas reales.

Desde la entrada del nuevo milenio, España continuó experimentando un crecimiento constante del turismo. Debido a ello, se realizaron mejoras en las infraestructuras turísticas, se crearon parques temáticos y se incrementó la construcción de hoteles y apartamentos turísticos, lo que aumentó la oferta de turismo de lujo.

Actualmente, la globalización y los avances en la tecnología, incluyendo la creación de plataformas de reserva en línea y aplicaciones móviles, han hecho que viajar sea más fácil que nunca, con la llegada de millones de turistas explorando las grandes potencias turísticas de nuestro país.

El Turismo en el Siglo XXI

Hoy en día, España es uno de los destinos turísticos más importantes del mundo, conocido por su rica historia, gastronomía, festivales y diversidad de paisajes. Las ciudades como Barcelona, Madrid, y Sevilla, así como destinos rurales y playas, continúan atrayendo a millones de visitantes cada año.

La pandemia de COVID-19 también ha impactado el sector, forzando a la industria a replantearse su modelo, priorizando la sostenibilidad y la seguridad. Proyectos de turismo responsable y eco-turismo están ganando popularidad, y se busca una mayor integración de las comunidades locales en el desarrollo turístico.

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