España
ELECCIONES EN EXTREMADURA

Vox no ve pacto con el PP «hasta después del 8F» y pone una línea roja: presidir la Asamblea de Extremadura

El PP dio la presidencia de la Asamblea al PSOE en las anteriores elecciones

Las elecciones en Aragón serán clave para los pactos en Extremadura

Vox quiere la presidencia de la Mesa de la Asamblea de Extremadura en esta legislatura como la quiso en la anterior. Una señal de que irían bien las cosas de cara «a un posible pacto de gobierno con el PP», explican desde la formación a OKDIARIO.

Para Vox, la presidencia de la Mesa es un puesto clave, dado que los legitima institucionalmente y evita con ello las posibles tentativas de bloqueo por parte de sus rivales en la Asamblea de Extremadura a lo largo de la legislatura, como ha sucedido en todas las regiones en las que no cuentan con representación, como la propia Extremadura o la Comunidad de Madrid.

PP y Vox tienen tiempo para entenderse hasta el 20 de enero, fecha límite para constituir el nuevo Parlamento regional. Por ahora, no han establecido contacto, según ha podido saber este periódico. Ello, pese a que María Guardiola prometió en la noche electoral que este mismo lunes comenzaría una ronda de conversaciones con todas las formaciones.

Vox ve difícil que se llegue a un hipotético pacto de Gobierno con el PP antes del 8 de febrero, día en que se celebran las elecciones adelantadas en Aragón convocadas por Jorge Azcón. La fecha tope para la investidura en Extremadura es el 19 de febrero.

El PP negó a Vox la Asamblea

De cara a las negociaciones y posibles pactos, la posición del PP en la negociación de la presidencia de la Asamblea de Extremadura será reveladora, insisten desde Vox.

El partido mantiene su recelo hacia María Guardiola dado que en las anteriores elecciones los populares dieron la presidencia de la Asamblea a la socialista Blanca Martín. Esto precipitó el enfrentamiento directo entre PP y Vox y dificultó hasta el último momento el pacto de gobernabilidad.

Para Vox, por ende, la presidencia de la Asamblea será una línea roja, teniendo en cuenta los resultados que han obtenido en estos comicios: el partido ha logrado más del doble de escaños que en 2023 –pasando de 5 a 11–, y es el único que ha aumentado el número de votantes –89.360 votos frente a los 49.360 de hace dos años–.

El presidente de Vox, Santiago Abascal, ya adelantó que está abierto a «muchas posibilidades» mientras se respeten los resultados electorales, «un punto de inflexión» no sólo a nivel regional. Un mensaje que ha trasladado también el secretario general, Ignacio Garrido, este martes, apuntando a que no exigen «sillones», sino impacto en las políticas que fuercen al «cambio».

La postura del PSOE con Guardiola

El escepticismo de Vox de cara a la decisión que tome finalmente el PP viene motivado por los inminentes cambios de estrategia que el PSOE extremeño está urdiendo tras la dimisión del imputado Miguel Ángel Gallardo como secretario general regional del partido.

En estos momentos, en el seno del PSOE existe el debate -negado de plano por Ferraz- de ofrecer una abstención a Guardiola para bloquear a Vox –tal y como propone Juan Carlos Rodríguez Ibarra– o votar en contra de su investidura –como sostiene Álvaro Cotrina, recordando que en las anteriores elecciones el PSOE fue el partido más votado y el PP optó por gobernar con «la ultraderecha» y no abstenerse a la candidatura de Guillermo Sánchez Vara–.

La nueva postura de Guardiola con Vox

Por su parte, Guardiola ha dado un paso al frente y ha cambiado la estrategia que mantuvo en 2023. Desde el primer momento, ha mostrado su predisposición a pactar con Óscar Fernández Calle. Guardiola –a cuatro escaños de la mayoría absoluta– pone como condición a Vox  «un compromiso de seriedad», en alusión a la decisión de Abascal de romper los gobiernos de coalición.

Un asunto que no preocupa a Vox, teniendo en cuenta los resultados en Extremadura. Defienden que esa decisión vino motivada por «la defensa de sus votantes» sobre la acogida de menas que imponía el Gobierno de Pedro Sánchez. Un asunto que vuelven a poner sobre la mesa.

«Los españoles están hartos de ver cómo PP y PSOE han disparado los impuestos, han disparado la inseguridad y han dificultado el acceso a la vivienda. Vox está para señalar a los culpables y, sobre todo, para ofrecer una alternativa», zanjan desde la secretaría general.