España
Plan de "ahorro energético"

La UE pide medidas «claras, necesarias y proporcionadas» mientras Sánchez impone el caos del decretazo

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

El decreto de «ahorro energético» ya se aplica en España, entre polémica e incertidumbre. La falta de concreción de las medidas -no se sabe exactamente qué establecimientos tendrán que ajustar la temperatura del aire acondicionado a los 27 grados o a los 25- así como la falta de un régimen claro de sanciones -se remite a la Ley de Industria- o el desconocimiento sobre cómo se vigilará que el plan se cumple ha sumido a las comunidades autónomas y a los ayuntamientos en el caos. El Gobierno, además, pasa por alto la normativa de ahorro de energía acordada en la propia Unión Europea, que recoge que las medidas adoptadas por los Estados miembros estén «claramente definidas» y sean «necesarias, transparentes, proporcionadas, no discriminatorias y verificables».

Así se concreta en el reglamento que el Consejo de la UE -órgano de representación de todos los Estados miembros- emitió el pasado 5 de agosto sobre «medidas coordinadas para la reducción de la demanda de gas», al que ha tenido acceso OKDIARIO.

En el texto, se insiste, además, en que la reducción de la demanda es, por ahora, «voluntaria» de cara a hacer frente a un «riesgo inminente de perturbación del suministro de gas a la Unión». Si bien se advierte que «las medidas voluntarias para la reducción de la demanda pueden no ser suficientes por sí solas para garantizar la seguridad del suministro y el funcionamiento del mercado». «Por tanto, a fin de atender rápidamente los retos específicos que plantea el grave empeoramiento, en curso y previsto, de la escasez de suministro de gas y evitar distorsiones entre Estados miembros, debe establecerse un nuevo instrumento que introduzca la posibilidad de reducción obligatoria de la demanda de gas para todos los Estados miembros. Dicho instrumento debe estar operativo con suficiente antelación al otoño de 2022».

Desde la Comisión Europea, y a consulta de este periódico, subrayan que «los países de la UE son los responsables de elegir sus propias medidas para alcanzar los objetivos de reducción» porque son ellos los que están en «mejor posición» para decidir cuáles son las más apropiadas a su situación. En ningún caso Bruselas marca límites de temperatura u horarios de apagado de los escaparates y edificios. En el artículo 20 del citado reglamento se precisa, en la misma línea, que «los Estados miembros deben tener libertad para elegir las medidas adecuadas para lograr la reducción de la demanda».

Más duras

Como ha informado este periódico, por el momento, España es el país que aplica las medidas más restrictivas. Los grandes países europeos no cuentan aún con un plan de «ahorro» aprobado y sus propuestas están siendo actualmente consensuadas con los sectores afectados. Además, en muchos países, son los ayuntamientos los encargados de adoptar las medidas que más se ajusten a su situación.

Así, por ejemplo, en Francia se prevé extender una normativa  vigente desde 2012 para el apagado de los escaparates entre la 1 y las 6 de la madrugada. Esto significa que en España las luces de zonas tan frecuentadas como la Gran Vía madrileña tendrán que estar apagadas desde tres horas antes que en nuestro país vecino.

Además, el Gobierno de Emmanuel Macron ha anunciado sanciones de hasta 1.500 euros por su incumplimiento. En España, las infracciones leves pueden ser castigadas con hasta 60.000.