España
'Caso Koldo'

La UCO sitúa a Aldama como el «nexo corruptor» en el ‘caso Koldo’: estaba infiltrado en la Guardia Civil

Los agentes envían al juez Ismael Moreno un nuevo informe sobre el caso de corrupción del PSOE

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha identificado al empresario Víctor de Aldama como el «nexo corruptor» en lo que denominan la «trama Koldo». Apuntan a que se habría dedicado a conectar, «con intenciones claramente espurias», el Ministerio de Transportes con diversas empresas que estaban «bajo el control y dirección». Según un nuevo informe de la UCO remitido al juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno, estas empresas no sólo le generaban al empresario beneficios económicos directos gracias a su penetración en el ministerio, sino que también se utilizaban como «vehículos para efectuar pagos ilícitos o dádivas». La UCO subraya que Aldama –conocido por tener relación empresarial con Begoña Gómez, mujer de Pedro Sánchez– contaba con un «conjunto robusto de elementos» que le permitían ejercer su influencia y facilitar la infiltración de su presunta organización criminal dentro de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

El informe, de 87 folios y al que ha tenido acceso OKDIARIO, expone detalladamente cómo Aldama habría utilizado su influencia para también lograr infiltrarse en el Ministerio de Transportes y manipular los procesos de adjudicación, aprovechando su red empresarial y sus conexiones con personas clave dentro de la administración pública. Entre los implicados en la trama, la Guardia Civil destaca al comandante Rubén Villalba, quien, según la investigación, mantenía contacto con Aldama a través de Koldo García, ex asesor de José Luis Ábalos en el ministerio. En este contexto, Villalba habría jugado un papel fundamental al servir como un canal de acceso, utilizando su posición dentro de la Guardia Civil para favorecer los intereses de Aldama y de su red empresarial.

Estos pagos tenían como fin asegurar la complicidad de determinados funcionarios públicos para favorecer sus intereses. El informe también señala que las relaciones entre Aldama y varios funcionarios públicos clave se basaban en la entrega de beneficios económicos y otras ventajas ilícitas, lo que refuerza la tesis de que la trama no solo buscaba beneficios económicos inmediatos, sino también asegurar la lealtad de ciertos actores en el aparato estatal para garantizar un flujo continuo de contratos y favores gubernamentales.

Resaltan los agentes que Villalba habría recibido «una contraprestación económica cuya finalidad primordial era asegurar la protección y continuidad de la presunta organización criminal» mediante dos ejes. Uno sería garantizando la seguridad interna u orgánica de los miembros, «que comprende la salvaguarda de sus comunicaciones y su seguridad personal», y otro sería garantizando la seguridad externa «protegiendo los actos de corrupción propios de la operativa delictiva». Se trata de un caso en el que ejercen la acusación popular Liberum Asociación, Hazte Oír, Partido Popular, Vox, entre otros.

«Compleja estructura»

«La presente investigación pone de relieve, de manera inequívoca, el rol central que desempeña Aldama en este entramado corrupto. Aldama personifica el nexo corruptor. (…) Las organizaciones criminales, como modus operandi recurrente, utilizan la corrupción para infiltrarse en los diversos ámbitos de actuación tanto del sector público como del privado. Para lograrlo, recurren al cohecho y al tráfico de influencias, herramientas esenciales que facilitan la ejecución de sus actividades delictivas y les permiten materializar los beneficios económicos que derivan de las mismas», recoge el documento.

Koldo García (de espaldas) y Rubén Villalba, el guardia civil, en la marisquería.

«En este contexto, Aldama, en su condición de líder de su organización, ha articulado una compleja estructura financiera y societaria de alcance tanto nacional como internacional, la cual ha experimentado diversas mutaciones a lo largo del tiempo. Bajo sus directrices, se encuentran subordinados el resto de socios que fueron detenidos junto a él [los cuatro mosqueteros], a quienes utiliza para la ejecución de múltiples tareas; siendo la más relevante, a efectos de este informe, la gestión, localización y entrega de sumas de dinero en efectivo a Rubén Villalba», exponen los agentes.

La UCO recuerda que «la relación entre Aldama y Villalba tiene su génesis en el año 2019, y surge por intermediación de Koldo García, con quien Villalba mantenía una relación previa, lo cual refleja una continuidad temporal que trasciende a la mera gestión de los contratos sanitarios que dieron origen a la presente causa. En este marco, el 3 de marzo de 2024, Villalba fue detenido, aprehendiéndose en el momento de su detención de dos móviles y dos portátiles. El análisis del contenido de dichos dispositivos evidencia las actividades desarrolladas por Villalba en favor de la presunta organización criminal».