El Supremo excarcela por la Ley Montero a un violador que embarazó y contagió la hepatitis a su víctima
El Tribunal Supremo se ha visto obligado a excarcelar por la Ley Montero a un violador que dejó embarazada a su víctima, teniendo ésta que abortar posteriormente, y a la que contagió también de Hepatitis C. Lo ha hecho en aplicación de la ley del sólo sí es sí aprobada por el Gobierno de Pedro Sánchez con el patrocinio de Irene Montero. Según ha podido saber OKDIARIO en exclusiva, el Alto Tribunal ha tenido que rebajar cuatro años la pena de prisión de 15 años, a la que había condenado al acusado, y debido a la Ley Montero volverá a pisar la calle en los próximos días.
Los magistrados Leopoldo Puente, Javier Hernández, Carmen Lamela, Antonio del Moral y Manuel Marchena deliberaron el pasado martes el recurso de casación y confirmaron, en aplicación a la ley de Garantía Integral de la Libertad Sexual conocida como ley del sólo sí es sí, la rebaja de cuatro años de cárcel aprobada por la Audiencia Provincial de Madrid tras aplicar la reforma impulsada desde el Gobierno socialista.
El condenado, que ahora se verá beneficiado, violó en dos ocasiones a la víctima. Primero en noviembre de 2008 cuando accedió al domicilio de ésta, sin su consentimiento y aprovechando que conservaba una copia de la llave de la vivienda. «Tras quitarle la ropa la víctima, la empujó sobre la cama y la penetró vaginalmente, eyaculando en su interior, dejando embarazada a la denunciante y viéndose obligada a abortar», resalta en los hechos probados de la sentencia condenatoria del violador.
Pero no encontrándose satisfecho con los traumáticos hechos ocasionados a la víctima, el acusado volvió a violarla unos meses después. El 11 de febrero de 2009, sobre las 10:30 horas, se introdujo en el domicilio de la víctima a través de la ventana del salón que se encontraba abierta. «Una vez en el interior, se dirigió a la habitación» y la víctima, al verle, le suplicó asustada que se marchara.
Pero el violador beneficiado por la Ley Montero «hizo caso omiso a su requerimiento y, sin su consentimiento, comenzó a quitarle la ropa». La denunciante «intentó huir, pero el condenado se lo impidió, lanzándola sobre la cama y, tras agarrarla fuertemente por las muñecas, la penetró vaginalmente, sin preservativo, eyaculando en su interior». En ese momento, según aseguran a este periódico, el condenado contagió a la víctima la Hepatitis C.
El violador retuvo a la mujer durante una hora y media. Ésta aprovechó que él se ausentó para ir al baño y pudo escapar del domicilio. Desde entonces el condenado se encuentra en prisión y en 2010 fue condenado a 15 años de cárcel por dos delitos de agresión sexual -de seis años cada uno-, dos delitos de allanamiento de morada -de seis meses cada uno- y un delito de detención ilegal por el que fue condenado a dos años.
Sin embargo, el abogado del condenado ha solicitado ahora la libre absolución del violador en aplicación a la Ley Montero. Y, efectivamente, los jueces se han visto obligados a reducir las penas por agresión sexual de 6 años a 4 años, viéndose la condena reducida de 15 años a 11 años. Así, este violador, que debía salir de prisión en febrero del próximo año, saldrá medio año antes a la calle gracias a la ministra de Igualdad, Irene Montero.
Violadores excarcelados
Esta excarcelación se suman a los 121 violadores que han salido a la calle y los 1.205 agresores sexuales beneficiados por la ley del sólo sí es sí de Irene Montero, según los últimos datos transmitidos por el Consejo General del Poder Judicial.
Y es que, resulta paradójico que la Ley Montero, que el Gobierno presentó como una defensa reforzada de las mujeres al gusto del movimiento social «hermana, yo sí te creo» y en contra de lo que la izquierda calificó de forma partidista como el «Código Penal de La Manada», ha acabado beneficiando a los violadores e incluso a los condenados por la violación en los Sanfermines de 2016.
El Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) ha rebajado en un año la pena de cárcel impuesta a Ángel Boza, uno de los miembros condenados por la violación grupal de los Sanfermines, tras aplicar la ley del sólo sí es sí, impulsada por la ministra de Igualdad, Irene Montero. Boza fue condenado a 15 años de prisión por un delito continuado de violación con las agravantes específicas de trato vejatorio y actuación conjunta de dos o más personas. Esta pena pasa a ser de 14 años de cárcel tras la aplicación de la Ley Montero.