España

Reclaman 500.000 € a los gestores podemitas del Colegio de Arquitectos por irregularidades durante su mandato

El clan podemita del Colegio de Arquitectos de Madrid se enfrenta a una reclamación de medio millón de euros por las irregularidades cometidas durante su gestión del organismo. La Fundación del Colegio de Arquitectos vendió en el año 2013 el edificio de su sede en la Calle Piamonte de Madrid. Entonces, la asesora de José Manuel Calvo -primero en las filas de Podemos y luego en las de Íñigo Errejón, y concejal con Manuela Carmena- era la secretaria de la Junta de Gobierno del Colegio y de su Fundación, a las que pertenecía también el hijo de Manuela Carmena, Manuel Leira.

El edificio fue vendido por debajo del precio autorizado por el Patronato de la Fundación y por el Protectorado de Fundaciones del Ministerio de Cultura y Deportes quienes. Y ahora, tras la denuncia publicada por OKDIARIO, la investigación llevada a cabo por el Colegio ha concluido no sólo dando la razón a este diario, sino, además, iniciando el ejercicio de acciones contra los responsables, entre los que se encuentra la asesora del concejal podemita, Pilar Pereda -igualmente asesora de la alcaldesa Carmena durante su mandato-.

OKDIARIO publica hoy en burofax con el que se reclama al clan podemita casi medio millón de euros. Según se desprende de la comunicación enviada por el despacho de abogados encargado de defender los intereses de la Fundación del Colegio, el despacho Pérez-Llorca, “la operación fue lesiva para el patrimonio de la Fundación como consecuencia de una actuación contraria a los deberes inherentes al ejercicio de su cargo de determinados patronos”.

El escrito enviado por los letrados de la Fundación señala, además, que “en el marco de la operación, la Fundación asumió […] condiciones abusivas y claramente perjudiciales para su patrimonio, sin estar estas aprobadas ni por el Patronato ni por el Protectorado. Lo anterior, además, se produjo con una manifiesta ocultación de información relevante, tanto al resto de miembros del Patronato, como al Protectorado”.

El burofax reclama, en consecuencia, el importe del perjuicio patrimonial para la Fundación, valorado en 490.709,96€, a la vez que considera que en la operación se cometieron graves irregularidades, coincidiendo con las conclusiones de la Fiscalía que, al haber transcurrido más de cinco años desde que se produjeron los hechos, no ha podido actuar.

Por si fuera poco, Pilar Pereda, la asesora de Calvo, que llegó al Ayuntamiento de la mano de Carmena, debe devolver otros 55.745€ de los contratos de formación en los que enchufó a su marido abusando de su cargo. Este importe fue facturado a nombre de una sociedad de la que ella es partícipe, Energía y Edificación S.C.P., tal y como ya publicó OKDIARIO.

Reacción de los implicados

La reacción de los podemitas no se ha hecho esperar. Ellos conocían los movimientos del Colegio para realizar la reclamación desde hace semanas y el concejal podemita en el Ayuntamiento de Madrid, José Manuel Calvo, lleva todo ese tiempo presionando a la decana con un asunto que nada tiene que ver como parte de una campaña de presiones diseñada para desgastar a la responsable del Colegio. La campaña se ha centrado en acusar a la líder de Vox en Madrid, Rocío Monasterio, por intrusismo profesional, ante la Comisión de Deontología del Colegio de Arquitectos. Esta Comisión rechazó la sanción a Monasterio. Y a raíz de ellos, Calvo ha exigido a la decana que castigue a Monasterio. De ese modo, Calvo pretendía lograr dos objetivos: uno político de ataque a Vox; el otro, puramente de debilitamiento de la decana al forzarla a adoptar un posicionamiento contrario a la dinámica propia del Colegio y al dictamen del órgano deontológico.

Ahora se descubre que Calvo tiene un doble rasero: uno el que usa contra Vox; el otro el que emplea cuando se trata de la que fue su asesora mientras ocupó el cargo de Delegado del Área de Desarrollo Urbano Sostenible en el Ayuntamiento de Madrid, Pilar Pereda, a la que el Colegio de Arquitectos reclama la devolución de medio millón de euros.

Aún conociendo la gravedad de los hechos cometidos por estos arquitectos, encabezados por el entonces decano del Colegio, José Antonio Granero, no consta denuncia alguna en la Comisión de Deontología contra los partícipes en estas actuaciones irregulares: Y ellos, lejos de asumir su culpabilidad, según nos informan fuentes conocedoras del burofax, han iniciado una campaña de intimidación y amenazas contra sus compañeros dirigida a
encubrir este escándalo.