España

La presidenta del tribunal del ‘caso Urdangarin’ sale con un amigo de Diego Torres

El caso Urdangarin se encamina hacia su resolución salpicado por diversas informaciones que afectan a algunos de los principales encausados. Así, hace días se hacía pública una conversación entre responsables del sindicato Manos Limpias en la que se hablaba sobre una supuesta oferta económica para retirar la acusación contra la infanta Cristina. Ahora, cuando todo apunta a que la sentencia es inminente, se ha conocido la relación entre una de las magistradas que juzgan el caso con alguien muy cercano a Diego Torres.

La juez Samantha Romero, que ejerció como presidenta en el juicio del caso Urdangarin, tiene un vínculo sentimental desde hace meses con Francesc Cardona, persona muy cercana a Diego Torres, menorquín como él y antiguo compañero de instituto del ex socio de Urdangarin. Torres está considerado el cerebro de la trama de corrupción que permitió al ex profesor de Esade y al marido de la infanta apoderarse de más de seis millones de euros de diversas administraciones públicas. El fiscal anticorrupción Joan Horrach pidió 16 años y medio de cárcel para él en sus conclusiones finales sobre el caso el pasado mes de junio

Cardona fue sacerdote y en su carrera eclesiástica llegó ocupar el cargo de vicario judicial de Menorca. Actualmente, reside en Palma de Mallorca y al parecer conoció a la magistrada en marzo, un mes después de que arrancara el juicio, aunque su relación no se habría iniciado hasta unos meses después. Este mismo mes de septiembre acudieron juntos a una boda en la localidad menorquina de Ciutadella.

La sólida amistad entre Torres y Cardona quedó reflejada en una noticia publicada por OKDIARIO el pasado mes de marzo, en la que se informaba de la cena que mantuvieron Torres y Urdangarin junto a sus respectivas esposas en casa de un amigo del primero identificado como Xisco.

Fuentes judiciales aseguran que la relación entre el amigo de Torres y la jueza no afecta para nada al caso, y que no es motivo suficiente para que Romero tuviera que abstenerse de juzgarlo porque su independencia no está en entredicho, según publica este jueves el periódico Última Hora.