España

Podemos renuncia a su bandera ‘anticapitalista’ y abre la puerta a los créditos bancarios

  • Luz Sela
  • Periodista política. En OKDIARIO desde 2016. Cubriendo la información del Congreso de los Diputados. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Santiago de Compostela. Antes, en COPE, ABC Punto Radio y Libertad Digital.

Podemos ya no se compromete en sus estatutos a renunciar a los créditos bancarios, algo que hasta ahora había sido una de las grandes banderas de Pablo Iglesias en su discurso anticapitalista.

La denuncia parte de una de las corrientes internas del partido, Profundización Democrática, que considera «preocupante» que los nuevos estatutos -ya muy polémicos por el férreo control de la dirección- no recojan esa prohibición que sí contenían los documentos de Vistalegre. La transposición de esos textos ha desatado una guerra total en el partido, con denuncias por parte de los críticos por los «cambios ilegítimos» que, consideran, Iglesias ha llevado a cabo aprovechándose del periodo estival.

Las nuevas normas no contienen, como sí las anteriores, referencia alguna a los bancos. Hasta ahora, el partido señalaba su «compromiso de renunciar a financiación bancaria y de sólo depender de las aportaciones voluntarias de la ciudadanía» y enfatizaba que «las fórmulas de financiación de Podemos están orientadas a ampliar al máximo la base de donantes para garantizar la independencia financiera». Como únicas vías de financiación aceptadas estaban las donaciones por transferencia, el discutido ‘crowdfunding’-puesto en duda por el propio Tribunal de Cuentas- las colaboraciones periódicas o los microcréditos para campañas electorales.

Sin embargo, los nuevos estatutos no recogen mención alguna a los bancos.  En lo relativo a las obligaciones financieras, los compromisos del partido se limitan a publicar en su Portal de Transparencia todos los gastos e ingresos de la organización, limitar las donaciones máximas a 10.000 euros por año y persona, «a excepción de las de los cargos electos de la organización»,  y publica la identidad de quienes realicen donaciones de más de 5.000 euros.

«El partido llevará, además de la base de datos de personas afiliadas, los libros de actas, contabilidad, tesorería, inventarios y balances que permitan en todo momento conocer su situación financiera. Se realizarán informes de transparencia detallados con una periodicidad trimestral», son sus restantes menciones.

Sí abundan, en cambio, en un control estricto sobre los círculos y las comunidades en lo que a las finanzas se refiere. Además, se otorga a la Ejecutiva la capacidad de nombrar a una persona que supervise el capítulo financiero, algo que hasta ahora correspondía al Consejo Ciudadano.

«El responsable de la gestión económico-financiera del partido se denominará Responsable Económico Financiero y será nombrado por el Consejo Ciudadano estatal a propuesta del Secretario General y su función será mantener, de acuerdo con la persona Responsable del Equipo de Finanzas y Transparencia del Consejo Ciudadano estatal, un control permanente sobre la gestión económica del partido independientemente de su ámbito territorial junto a las demás funciones que le sean asignadas por el partido o por la ley», establece en concreto el texto.

Ganancias de 12 millones de euros

Podemos presume en su cuenta de resultados de una situación económica ciertamente saneada. Según los datos de la organización, el ejercicio de 2016 se cerró con un resultado a favor de 11.594.836 euros. Una cifra que supera ampliamente los 2.264.149 del año anterior, debido, fundamentalmente, a los ingresos de origen público, como las subvenciones anuales para gastos de funcionamiento, que pasaron de 4.947.877 en 2015 a 18.460.863 solo un año después.

La presencia en las instituciones ha supuesto para el partido una jugosa vía de ingresos. La principal, con mucha diferencia, porque de aportaciones privadas (ingresos de afiliados, donaciones o aportaciones de sus cargos) ‘apenas’ recibió 4.618.651 euros (2.793.379 en 2015). En concreto, Podemos ha visto menguadas las donaciones de sus simpatizantes, 1.614.808 euros en 2016 frente a los 1.759.858 del año anterior.

En su balance, la formación de Iglesias declara tener un ‘pasivo’ de 2.129.099 euros, de las que la mayoría son ‘deudas’ a corto plazo. Con entidades de crédito aseguran no tener deudas contraídas. El patrimonio neto del partido asciende a 14.222.819 euros, notablemente superior a los 2.628.120 del año 2015.