España

El independentismo ya tiene 67 diputados asegurados tras acreditarse los sustitutos de Forn y Ponsatí

Los diputados de JxCat Antoni Morral y Saloua Laouaji han presentado la documentación necesaria para convertirse en diputados de pleno de derecho, según publica el Boletín Oficial del Parlament de Catalunya recogido por Europa Press.

Se trata de los dos parlamentarios que sustituirán a los consellers cesados Joaquim Forn y Clara Ponsatí —el primero, en la cárcel y la segunda, fugada en Bélgica—, que se presentaron a las elecciones en la lista de JxCat pero optaron por renunciar al acta de diputado.

El Boletín refleja que Morral y Laouaji han presentado las credenciales que expide la Junta Electoral Provincial, y también que la reunión la Mesa del Parlament del martes 30 de enero certificó que habían presentado el resto de documentación necesaria: la declaración de bienes y actividades y el acatamiento de la Constitución y el Estatut.

Así, sólo faltan dos sustituciones por completarse, las de los consellers cesados prófugos de la Justicia en Bélgica Lluís Puig (JxCat) y Meritxell Serret (ERC), que también renunciaron a su acta a principios de la semana pasada y deben ser sustituidos por Ferran Roquer (JxCat) y David Rodríguez (ERC).

Ya tienen 67 diputados asegurados

Cuando se completen todas las sustituciones que hay en marcha, el independentismo se asegurará 67 diputados que pueden acudir presencialmente a la Cámara, lo que les permitirá estar sin problemas en el pleno de investidura cuando este se celebre.

Sólo quedarán en el aire el voto de tres diputados independentistas: Oriol Junqueras (ERC) y Jordi Sànchez (JxCat), que están en la cárcel, y el del candidato, Carles Puigdemont (JxCat), que escapó a su orden de detención un día después de declarar la ‘independencia’ y desde entonces permanece huido en Bélgica y no ha aclarado si contempla volver para su investidura.

Junqueras y Sànchez han pedido delegar su voto en un compañero de grupo, algo que deberá autorizar o no la Mesa del Parlament, mientras que Puigdemont mantiene la incógnita sobre lo que hará: pidió también delegar el voto, pero luego retiró su solicitud.

En segunda vuelta

Según la ley catalana de la Presidencia de la Generalitat, el candidato necesita la mayoría absoluta de los votos, 68 escaños, en primera vuelta para ser investido y, si no lo logra, le vale con la mayoría simple en segunda vuelta, más votos a favor que en contra.

Si Junqueras, Sànchez y Puigdemont finalmente no votan, con los 67 escaños presenciales que tiene el independentismo ahora mismo le valdrían para investir un presidente en segunda vuelta —les faltaría uno para hacerlo en primera—, ya que derrotarían los 65 de la oposición —Ciudadanos, PSC, comuns y PP—.