El máster de Género de la Rey Juan Carlos que hizo la ministra Montón tuvo un 95% de aprobados

El máster de Género de la Rey Juan Carlos que hizo la ministra de Sanidad, Carmen Montón, tuvo un 95% de aprobados. Se trata de un posgrado dirigido por el catedrático imputado por falsedad documental en el máster de Cristina Cifuentes, Álvarez Conde, y la profesora Laura Nuño, que dijo que habían falsificado su firma en el acta de calificación del trabajo de fin de máster de la ex presidenta madrileña.

El curso de posgrado de la Universidad Rey Juan Carlos tenía una tasa de aprobados altísima: el 95% de alumnos. Los estudios de Género fueron imputados por el propio Partido Socialista, en la época de Bibiana Aído y contaba con el apoyo sistemático de CCOO. Además, se da la circunstancia de que Carmen Montón cursó esta titulación cuando ella era la portavoz socialista en el Congreso de la Comisión de Igualdad, justo el área de referencia e impulso del máster.

El objetivo declarado de este máster era formar gente que trabajase en las mecánicas de impulso e intervención social para implantar la política de género, uno de los grandes objetivos socialistas. Y a buen seguro que ese objetivo se conseguía: porque la práctica totalidad de los matriculados salía con un título de máster de clara ideología progresista bajo el brazo.

Entre los grandes impulsores de esta titulación se encontraban Enrique Álvarez Conde –director del Instituto de Derecho Público de la Universidad y director del polémico máster de Cristina Cifuentes–, y Laura Nuño, una de las profesoras que afirmó que su firma no coincide con la del acta del máster que exhibió como prueba la ya dimitida presidenta madrileña.

Ambos formaban parte desde 2007 del grupo que coordinaba desde la Rey Juan Carlos los cursos y másters impulsados directamente por el PSOE: con presencia directa de Bibiana Aído y respaldo de CCOO. Y es que el Máster Oficial en Género y Políticas de Igualdad era un empeño personal de Zapatero que se fraguó en aquella universidad como máster bandera del PSOE.

Ese máster –que dio lugar posteriormente al grado– tenía un objetivo: impulsar expertos en esa materia que vigilasen posteriormente la implantación de la ideología de género en el trabajo y la política. Una de las grandes bazas del último mandato socialista.

La otra persona que negó que su firma fuese la del acta del máster de Cifuentes fue Alicia López de los Mozos. Junto con Laura Nuño, también formaba parte del Consejo del Instituto que lanzó ese máster en condición de “doctores miembros”. López de los Mozos también trabajó en investigaciones en ese instituto en el área de Género y en otra de las áreas de máximo protagonismo político en la era Zapatero: la inmigración.

Una de las grandes impulsoras de estas titulaciones fue Laura Nuño, quien admitió personalmente en una entrevista que la supervivencia de la titulación había peligrado desde sus inicios. Y es que la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA) paralizó los estudios en 2009, pese a lo que el grado fue rescatado por el Consejo de Gobierno de la Universidad.

El grado empezó, de hecho, sin exigir ninguna presencia. Era en formato online. Pero dos años después, la ANECA exigió que se impartiese también de manera presencial. Así, pasó a ofrecerse con primer y segundo curso de forma presencial, y con tercero y cuarto, a distancia.

Hay que recordar que Montón cursó el posgrado siendo diputada en el Congreso por el PSOE y portavoz de la comisión de Igualdad de la formación socialista, partido que impulsó de la mano de la ex ministra de Igualdad, Bibiana Aído, el posgrado cuyo fin último era convertir los estudios en un título de Grado.