España
ENTREVISTA JUAN BRAVO

Juan Bravo: «Feijóo combina lo mejor de Ayuso y de Moreno, lo que España necesita»

Juan Bravo salió de Andalucía para recalar en Madrid, en un viaje que inició como consejero de Hacienda y de momento, le lleva a la planta noble de Génova, donde dirige el plan económico que Feijóo y el Partido Popular tienen pensado para España. Moncloa aún queda lejos, pero los españoles  acudirán el próximo año a las urnas con una economía endeudada y un clima político tenso por las decisiones políticas de Sánchez. Del Plan Feijóo, que será el Plan Bravo, hablamos en esta entrevista. El hombre que suena como futuro ministro de Hacienda en el primer gobierno del gallego, atiende a OKDIARIO en su antiguo despacho del Parlamento andaluz.

Pregunta.- Andalucía es un ejemplo de trabajo y crecimiento económico. ¿Ha copiado el Partido Popular el modelo andaluz para crear el Plan Feijóo?

Respuesta.- Andalucía no sólo es ejemplo en el plano económico, sino en la forma de gobernar y gestionar. La capacidad que ha tenido el Gobierno andaluz de escuchar al resto de formaciones políticas ha sido una fórmula que los ciudadanos han sabido premiar. Y desde el punto de vista económico, ese es el principal aval. Cuando hablamos de los puntos sobre los que tenemos que trabajar esa economía a nivel nacional, hay gente que te dice que la simplificación está muy bien, pero que eso no era factible hacerlo. En Andalucía sí. Dicen que la bajada de impuestos no tiene efectos; en Andalucía, sí. En relación a la gestión de los fondos europeos, se ha hecho un gran esfuerzo en Andalucía.

P.- Ha dicho en varias ocasiones que la ministra Montero ha mentido a Eurostat, a los españoles y le ha exigido que diga la verdad. ¿España está cerca o lejos de la recuperación económica?

R.- Un ministro de Hacienda no debe mentir, porque hay otros ámbitos en los que se pueden cambiar opiniones, pero aquí son números. Ella a Eurostat le engañó. Le dio unas cuentas que luego no eran así. Pero yo también escuché cómo ella nos dijo que no nos podía abonar el IVA de 2017 y finalmente lo tuvo que abonar. También decía que los ayuntamientos no podían utilizar los remanentes y finalmente los usaron. E incluso presumió de haber dejado unas cuentas fantásticas cuando Andalucía era la única comunidad autónoma que no cumplió las reglas.

De las grandes economías de Europa, España es la única que todavía no ha recuperado la riqueza prepandemia. Durante mucho tiempo han presumido de que crecíamos por encima de la media de Europa. La realidad es que ni nos hemos recuperado, ni crecemos por encima de la media.

Cuando hablamos de si se va a entrar o no en recesión, vayamos a lo que importa a la gente: las familias pagan más luz, más gas, más cesta de la compra y más hipoteca. Las familias están peor y nada apunta a que la situación económica vaya a mejorar, con lo cual, el Gobierno ahora mismo es un auténtico freno para un país como España, que tiene enormes oportunidades de crecimiento por el tema energético o industrial. Somos un país que, por primera vez, puede liderar Europa. Tenemos 200.000 millones de gestión de fondos europeos de aquí a 2027. Nunca nadie lo ha tenido. Ella (Montero) no ha seguido ninguna regla fiscal y lo que tenía no era para en asesores, ni para gasto político superfluo, sino para invertir en transformar y eso no lo ha hecho. España no crece, al revés.

P.- ¿Son las políticas de Sánchez y de Podemos un fracaso para los españoles?

R.- Preguntémosles cómo les va. Feijóo les dijo el pasado junio que los datos del Gobierno estaban maquillados. Y tenía razón. Hoy estamos por encima de tres millones de parados, un 12,6 por cierto, cuando la media de la Unión Europea está en un 6,2 por ciento. Deberíamos tener 1,6 millones de personas más trabajando y eso resolvería varios de los problemas actuales como el de las pensiones o el desempleo juvenil. Y esta situación no es nueva. También Zapatero negó la crisis.

P.- ¿Cómo se revierte esta situación?

R.-No existen fórmulas mágicas ni milagros. En Andalucía, el desarrollo que se está produciendo es gracias al trabajo de mucha gente, de quienes contribuyen a mejorar la economía, toda la sociedad civil, los nuevos autónomos que decidieron arriesgarse, las empresas que decidieron invertir porque vieron algo diferente; y un gobierno que les quería.

Nosotros creemos que el trabajo y el desarrollo viene de la colaboración público-privada. Eso es lo que ha permitido crecer en Andalucía. Y planteamos una bajada de impuestos selectiva, orientada al empleo, al crecimiento o a la inversión. No bajar por bajar. Simplificación de trabas administrativas y burocráticas, la necesidad de reformar la administración o de impulsar una unidad aceleradora de proyectos, que se creó aquí en Andalucía. En realidad a la necesidad de reducir el gasto político superfluo, el Gobierno ha incrementado el gasto en asesores en 252 millones de euros.

Por ejemplo, España tiene un enorme capacidad energética, pero no se está aprovechando. El Gobierno ha sacado 3.000 megavatios a subasta y, por ir contra las empresas, no se han adjudicado ni 50 megavatios, es decir, 2.400 millones de inversión que vendrían a España se marchan a otro sitio, a Portugal, a Estados Unidos. Vendrán otras inversiones, pero esas ya no vienen. Lo hemos visto también con el PERTE y el vehículo eléctrico y con muchas medidas. Estamos viendo que las inversiones, aunque presuman de ello, no vienen a España. 

P.- Se proclaman el “Gobierno de la gente” pero hoy tenemos a más españoles en riesgo de pobreza, ¿qué medidas tiene el Partido Popular para paliar esto?

R.- España tiene 13,1 millones de personas en riesgo de exclusión social, 3,9 millones de personas con carencia de material y social severa. Tenemos los peores índices de paro juvenil y paro femenino de Europa. ¿Qué tenemos que hacer? Crear empleo, porque el empleo es la mejor política social. Hay dos conceptos: dar la caña o el pescado. Ellos (la izquierda) quieren dar pescado para tener a gente dependiente y para mí lo importante es dar la caña. La gente, ya se ha demostrado en Andalucía, lo que quiere no son ayudas. Claro que hay colectivos muy vulnerables a los que hay que proteger, pero la gente lo que quiere es tener libertad para elegir lo que quiere hacer. Libertad para formar una familia y libertad para decidir sobre mis hijos, por ejemplo.

Tras el empleo, el segundo objetivo debe ser la formación. La educación es fundamental. Tenemos 3.3 millones de parados, pero luego hablas con el Colegio de Ingenieros y te dicen que faltarán 200.000 ingenieros de aquí a 2030. Vemos el problema de la sanidad y se necesitan médicos. Vemos el problema de la construcción y resulta que faltan más de 300.000 personas en este sector. Tengo la oportunidad de reunirme con el sector de la fresa de Huelva y requieren de personal para trabajar. Hablas con el sector de los autobuses y no tienen conductores, se van a contratarlos a Marruecos y Cabo Verde.

P.- La izquierda sigue con su mantra de que bajar impuestos favorece a los ricos. ¿A quién afecta realmente una subida o bajada de los mismos?

R.- España es un país de rentas medias y bajas, que son quienes pagan. El que tiene más capacidad económica tiene también el poder de montar estructuras para intentar pagar menos. Los que no se salen son los trabajadores, los autónomos y el empresario medio. Los que ganan entre 21.000 y 60.000 euros en este país, podemos considerar una renta media, son el 35% de la población y pagan el 50 por ciento del IRPF. Y posiblemente si lo pudiéramos extrapolar al IVA o a otros impuestos pagarían mucho más.  Cuando se ponen impuestos a bebidas azucaradas, a la banca, al plástico… los pagamos todos los españoles.

Que no engañen, subir o bajar impuestos no es de izquierdas o de derechas, es de buenos o malos gestores. En Portugal gobierna la izquierda, en algún momento gobernaron con algo parecido a Podemos, y bajaron los impuestos. Si ponemos un impuesto que no tiene Portugal, que no tiene Francia, que no tiene Italia, provoca que esos españoles que tienen que soportar ese impuesto, migran a esos territorios y perdemos los que tenemos que seguir viviendo aquí sí o sí.

P.- Usted subió recientemente un vídeo explicativo a redes donde contaba el plan económico que tiene Feijóo en mente. ¿Nos podría resumir sus principales puntos?

R.- Te lo hago en versión Tik-Tok (risas). En primer lugar, una fiscalidad orientada al crecimiento, la inversión y el empleo basada en una política de bajada de impuestos. En segundo lugar una simplificación administrativa de trabas burocráticas para ayudar a reformar la administración. Un tercer punto que sería la reducción del gasto político superfluo. El cuarto se centra en la mejora de la gestión de los fondos europeos. El quinto punto lo dedicamos al crecimiento y por último el empleo. Lo explico: cuando hablamos de bajada de impuestos, esta tiene que ser selectiva, y tiene que tener un fin, cómo generar empleo o incrementar las ayudas en I+D+i. Debemos hacer la administración más cercana, como se ha hecho y se sigue haciendo en Andalucía y profundizar en su reforma, para reorientar al personal de la administración pública cuando parte de la plantilla se jubile. Para 2030, entre el 35 y el 50% del personal funcionarial del Estado se jubilará. Es importante que podamos suplir unas funciones con otras, incluidas las que cubre la tecnología. Y para ello tenemos los fondos europeos.

Sobre el gasto político superfluo, la realidad se comenta por sí sola. En el Gobierno de España ahora mismo hay 252 millones de euros más en gasto de asesores que en la pasada legislatura. El Instituto de Estudios Económicos habla de que pueden ahorrarse más de 60.000 millones de euros de gasto público. La propia AIREF cifra en 25.000 millones el dinero público que puede gestionarse mejor. Si pudiésemos ahorrar eso, no habría debate sobre cómo pagaríamos el incremento de las pensiones. Podemos transformar España con los fondos europeos de aquí a 2027. Nadie se ha encontrado con un proyecto sobre cómo hacerlo.

Y todo esto tiene que estar orientado al crecimiento, que no siempre tiene que estar vinculado al ahorro. Podemos crecer con la transición energética, con las renovables, con el hidrógeno, con el turismo, la tecnología, la industria. Podemos ser líderes en muchos sectores y España liderar Europa en esos campos.  Cuando hablamos de empleo, significa que si conseguimos que puedan tener la oportunidad de trabajar 1,7 millones de españoles, más recaudación, más ingresos, habría más oportunidades, más libertad y en general, la gente estaría mejor.

Este es el proyecto del Partido Popular y debe ser el proyecto de este país de aquí al año 2030 con colaboración público privada, entre el Gobierno y la sociedad.

P.- ¿Para cuándo las elecciones?

R.- Pedimos elecciones ya, porque hay un señor que se presentó con un programa que no ha cumplido, que prometió no hacer todo lo que está haciendo ahora (gobernar con Podemos, pactar con Bildu, reformar delitos que pusieron en jaque a esta nación en 2017, etc). Que le pregunten a los españoles si quieren esto. La realidad es que las últimas veces que se han abierto las urnas, el PP ha arrasado. Quizá por eso tienen miedo (en Moncloa) de convocarlas. Solo el CIS, dirigido por un señor de un partido, les da como ganadores.

P.- ¿El PP va a necesitar a Vox para gobernar o cree que lo podrá hacer sin su apoyo?

R.- El ejemplo lo tenemos en Andalucía o en Madrid. Nadie daba esta opción y con un proyecto de escucha, de tolerancia y de gestión, conseguimos que fuera posible una mayoría. Somos conscientes de que es complicado hoy día alcanzar este escenario en España, pero el plan de Feijóo es seguir esa estela que marcaron Andalucía y Madrid. Y hay una mayoría de españoles que se sienten reflejados con lo que representa el presidente Feijóo.

Hemos demostrado que sabemos gobernar, El único partido que ha sabido crear empleo es el Partido Popular: Con Aznar, cinco millones de personas encontraron un trabajo. Rajoy se encontró un país quebrado y generó tres millones de empleos. ¿Por qué Juanma Moreno ha conseguido tanto reconocimiento social en la calle? Porque con esa forma de gestionar y escuchar provocó que confiarán en él. En ese apoyo, hay mucho votante socialista que ha visto en Juanma el reflejo de lo que quiere para su sociedad. Y eso es lo que pretendemos conseguir también con Feijóo.

P.- Si Feijóo gobierna, ¿se olvidarán en su partido de la histórica infrafinanciación de Andalucía?

R.- ¿Alguien duda de que con Feijóo se reformará el sistema de financiación? Es necesario. Habrá que hacer un análisis de gestión territorial. Cuando hablamos de violencia de género, no tiene sentido que haya una gestión en el Gobierno Central, otra en las comunidades autónomas, otra en las diputaciones, otra en los ayuntamientos, y que nos encontremos que se use más dinero en la gestión administrativa que lo que llega a las víctimas. Eso nadie lo puede entender.

P.- ¿Echa de menos San Telmo o ya se ve como ministro de Hacienda?

R.- Claro que se echa en falta. Hemos trabajado mucho, hemos sufrido, ha habido momentos muy difíciles, Con distancia se valora mucho más. Fue y es un proyecto que aún tiene mucho recorrido de mejora. En cuanto a lo de ministro, Feijóo no se lleva a Madrid a Juan Bravo. Se lleva, consensuado con Juanma, un proyecto, un modelo de gestión. Yo pensé que seguiría siendo consejero y hoy estoy, en la oposición, peleando en Madrid con un proyecto ilusionante en el que tenemos que ser capaces de construir de nuevo algo que ya hicimos en Andalucía. Lo más importante es el concepto de servidor público. Uno tiene que estar donde se le necesita. Esto no va de nombres, entre yo y nosotros, siempre nosotros. Entre gobierno y ciudadanos, siempre ciudadanos.