Sanidad calla tras destapar OKDIARIO el desvío de dinero público en contratos inflados para Melilla

El silencio por respuesta. Es la fórmula por la que ha optado el Ingesa y el Ministerio de Sanidad –del que depende ese organismo– para no dar explicaciones sobre el caso de contratos inflados que ha destapado OKDIARIO, adjudicaciones que incluyen artificialmente un sobrecoste del 5% en cuantiosas adjudicaciones para equipar el futuro hospital de Melilla. Todo ello a base de incluir como coste una tasa impositiva ficticia, el doble de la que debería aplicarse. Como ha desvelado este periódico, en un contrato ya adjudicado eso supone el desvío, por sobrecostes, de 227.000 euros que, además, salen de fondos europeos concedidos a España. OKDIARIO ha insistido en recabar una explicación tanto del Ministerio de Sanidad como de su Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), pero no han atendido estas peticiones y han optado por callar. Tras más de una semana tratando de obtener respuesta de los gabinetes de prensa tanto del Ministerio como del Ingesa, nada han dicho sobre esas caras anomalías de contratación.

Tras semanas de investigación, este diario ha comprobado cómo el Ingesa ha adjudicado contratos públicos a empresas privadas con un recargo de un 5% de impuestos. Ingesa ha pagado compras a compañías como Siemens Healthcare por valor de millones de euros públicos gravados con un 10% de impuestos cuando las normativas fiscales de la ciudad autónoma establecen que deben pagarse para este tipo de bienes un 5%. De este modo, ante este sorprendente extra de impuestos, OKDIARIO ha decidido ponerse en contacto con el Ministerio de Sanidad para conocer a qué se debe este sospechoso desliz.

Tras enviar varios correos electrónicos y hacer diversas llamadas telefónicas durante una semana, tanto Ingesa como el Ministerio de Sanidad guardan silencio. La propia Dirección Provincial de Ingesa, a cuyo frente está Omar Haouari, ha rehusado hacer cualquier comentario al respecto. Todos guardan silencio a pesar de ser organismos públicos financiados con dinero de los contribuyentes.

Además, es importante reseñar que el desvío de fondos ya supera con creces los 200.000 euros. También, los propios médicos melillenses alertan de que los precios pagados para el nuevo equipamiento médico que llegará al Hospital Universitario de Melilla son más que elevados respecto a los precios de mercado. «Este grueso error podría esconder una trama de comisiones de dinero público», aseguran fuentes solventes consultadas por OKDIARIO que conocen el caso de primera mano.

Servicios deficitarios

La Sanidad de Melilla no está atravesando su mejor momento. Mientras antes llegar como médico a la ciudad autónoma era disfrutar de unos privilegios que no se tenían en el resto de provincias españolas, ahora es más bien una condena. El aislamiento geográfico y el escaso atractivo de los puestos de facultativos ofertados ha provocado que la sanidad melillense esté más que deteriorada.

«Faltan médicos tanto en atención primaria como en la atención especializada, tenemos las bolsas de médicos a cero, nadie quiere venir aquí y lo entiendo», explica uno de los jefes del Hospital Comarcal de Melilla en una entrevista con OKDIARIO en la que prefiere mantener el anonimato. Asimismo, este doctor asegura que el «40% de la plantilla está prorrogarada o en edad próxima a la jubilación» por lo que Melilla podría quedarse sin médicos muy pronto. De hecho, en este centro hospitalario se han quedado sin dermatólogo, es decir, cualquier ciudadano que necesite de tratamiento dermatológico debe viajar para ser atendido.

Pero los servicios deficitarios en cuanto a personal también llegan a otras especialidades. El Hospital Comarcal de Melilla cuenta con un único oncólogo y en radiología tan sólo hay dos médicos cuando harían falta mínimo seis facultativos para dar un buen servicio a la ciudadanía. Esta falta de médicos provoca que los doctores tengan que repartirse las guardias teniendo que sacrificar sus libranzas.

Tras la pandemia, los sanitarios de muchas comunidades autónomas repartidas por la geografía española han mejorado sus condiciones labores. Sin embargo, en Melilla ha ocurrido todo lo contrario. Esto ha provocado que desde el mes de marzo los médicos melillenses estén en huelga reivindicando al Ingesa que mejore sus condiciones laborales. «Esto lejos de acabarse va a ir a más, no se puede abrir un nuevo hospital cuando faltan recursos humanos, hay que incentivar que vengan médicos y no se vayan los que están», asegura el Presidente del Colegio de Médicos de Melilla, Justo Sancho Miñano, en declaraciones a los medios de comunicación.