España
PROFANACIÓN

La humorista que se masturbó en un altar lo hizo en Francia para evitar la Justicia española

Una turba increpa a Abogados Cristianos por denunciar a la humorista que se masturbó en un altar

Abogados Cristianos logra sentar en el banquillo a Ane Lindane

La humorista de Baracaldo, Ane Lindane, eligió una pequeña ermita situada en la localidad francesa de Arbérats-Sillègue para blasfemar ante el Santísimo Sacramento subida en el altar y simular masturbarse con un crucifijo que llevaba en la mano. Ante el escándalo y estupor de las imágenes que circularon este pasado verano, Abogados Cristianos la denunció y este viernes, la vasca se ha sentado ha declarar ante los juzgados de Bilbao.

A la citación de Ane Lindane, la han acompañado una pequeña turba de extrema izquierda con banderas de la banda Antifascista –declarada como terrorismo callejero por Estados Unidos– que han intentado increpar a la presidenta de la asociación católica.

En Francia, no existe el delito de escario. Sin embargo, la denuncia de Abogados Cristianos interpuesta en el Juzgado de Instrucción de Bilbao, ha prosperado porque entienden que, pese a producirse en otro país, la repercusión de su actuación sí que se ha producido en España, porque lo ha difundido en redes sociales desde nuestro país.

El pasado julio, la humorista intervino en una performance el festival Euskal Herria Zuzenean (EHZ) que se celebró en este pequeño pueblo del País Vasco francés, en un templo católico. Tras la masturbación simulada en el altar, Lindane fue denunciada por Abogados Cristianos, por incurrido en un delito de escarnio, recogido en el artículo 525 del Código Penal.

En un primer momento, el juez estimó archivar la causa porque los hechos denunciados se habían producido en Francia, y no correspondía a la «jurisdicción española el conocimiento de los mismos». El auto justificaba que la acción de la humorista «se comparta o no», se enmarcaba, según indican los printers acompañados, en una protesta por los abusos sexuales
en la iglesia, y por ende su actuación estaba enmarcada en la “libertad de expresión».

Sin embargo, Abogados Cristianos interpuso un recurso de apelación señalando que el juez no había tenido en cuenta que el lugar donde se publicó el video de Ane Lindane difundiendo su performance sí había sido España, argumentando que «cuando se publicita en redes sociales previamente su performance sucede en nuestro país y al día siguiente se consuman los hechos».  En su escrito, la asociación católica defiende que «por un lado, hay escarnio de los dogmas, las creencias y los ritos o ceremonias, y por otro, se veja profundamente a los creyentes».

Según señalan, «el derecho a la libertad de expresión no ampara en modo alguno el derecho al insulto, no se castigan los ejercicios de crítica histórica, política o literaria, sino las vejaciones y burlas que superan tales niveles, por su entidad, persistencia o modo de presentarse».

De hecho, al día siguiente de la performance, la propia Lindane reconoció su blasfemia públicamente en redes jactándose: «Ayer di un gran monólogo en el festi Euskal Herria Zuzenean. En una iglesia sin desacralizar 200 personas hicimos tambalear los cimientos del catolicismo a carcajada limpia. Mancillamos, blasfemamos y denunciamos los abusos sexuales de la iglesia».

Como señalábamos, el recurso de apelación fue estimado y como respuesta, la humorista estaba citada a declarar este viernes, algo que, según ella misma ha reconocido, no esperaba que la denuncia prosperaba, a lo que reaccionó convocando una manifestación frente a los juzgados de Bilbao, «contra el fascismo y por la libertad de expresión», criticando que el proceso es «absurdo» porque en «Francia este delito no existe».

Por su parte, según ha adelantado Abogados Cristianos a OKDIARIO, la asociación católica, presidida por Polonia Castellanos, valoran alegan también el delito de profanación en la denuncia.

De prosperar la denuncia, Lindane se podía enfrentar a una pena de prisión de seis meses a un año o una multa de 12 a 24 meses –según la cantidad económica que apuntase el juez–, por el delito de profanación (artículo 524). Además, en nuestro código penal, el escarnio está castigado con una pena de multa de ocho a doce meses.

Ante las puertas del juzgado, Polonia ha recordado que «los que reivindican la libertad de expresión son los verdaderos intolerantes», tildando a Lindane de «cobarde» por pedir que se concentraran contra Abogados Cristianos.

El gesto de Lindane fue censurado también por otros movimientos católicos en España. Hasta el lugar, el impulsor del Rosario de Ferraz, José Andrés Calderón, se desplazó para rezar un rosario de restauración de las blasfemias, lo que provocó un enfrentamiento directo de Ane Lindane reconociéndose, según ella misma expresó en redes, «una hija de Satán».