España

El guardia civil de ‘La Manada’ será expulsado del cuerpo cuando se le notifique la sentencia

Antonio Manuel Guerrero Escudero, el guardia civil de ‘La Manada’, será expulsado del cuerpo en el momento que se le notifique la sentencia del Tribunal Supremo. Guerrero ha sido condenado a 17 años de prisión por la violación grupal de una joven en los Sanfermines de 2016.

Según fuentes de la Benmérita, la expulsión de la Guardia Civil no se produce de forma automática cuando se conoce la sentencia. Hay que esperar a que sea notificado por el Juzgado y en ese momento es cuando «se activarán los trámites de manera ágil».

Este viernes el Supremo ha revocado la sentencia a los cinco integrantes de ‘La Manada’, elevando sus condenas a 15 años de prisión por un delito continuado de violación con las agravantes específicas de trato vejatorio y actuación conjunta de dos o más personas.

El guardia civil de ‘La Manada’ deberá cumplir dos años más de prisión, hasta los 17, como responsable del delito de robo con intimidación. Guerrero le robó a la chica el teléfono móvil, por lo que la Sala incrementa también el importe de la responsabilidad civil a la que tiene derecho la víctima a la cantidad de 100.000 euros.

Suspendido en funciones

Antonio Manuel Guerrero Escudero estaba suspendido de funciones desde el pasado 10 de diciembre de 2018, tras serle notificada una decisión adoptada cinco días antes.

La orden estaba firmada por la ministra de Defensa, Margarita Robles, y el subsecretario del Ministerio, Alejo de la Torre. El guardia civil de ‘La Manada’ se encontraba hasta entonces en situación de servicio activo encuadrado «a efectos de régimen interior» en la Comandancia de Córdoba, aunque no tenía asignado ningún destino.

De la misma manera, otro de los integrantes de ‘La Manada’, Alfonso Jesús Cabezuelo, estaba suspendido de su condición de militar hasta que el pasado mes de octubre fue expulsado de las Fuerzas Armadas en virtud de la Ley de Tropa y Marinería. En aquel momento, fuentes de la Guardia Civil explicaron que la forma de proceder del Instituto Armado difería con respecto a las Fuerzas Armadas, por lo que Guerrero no podía ser expulsado hasta que no existiera una sentencia en firme.