España
Crisis del coronavirus

El Gobierno mantiene 326 laboratorios sin hacer test PCR en plena desescalada

El Ejecutivo de Sánchez ha decidido habilitar únicamente 24 centros de los 350 que se le ofrecieron para la prueba

Mientras la OMS pide test masivos y la comunidad científica no deja de reclamar pruebas generalizadas antes de iniciar la desescalada del estado de alarma, el Gobierno ha decidido habilitar únicamente 24 centros-laboratorios -de los 350 que se le ofrecieron- para realizar test PCR.

Los 326 centros restantes siguen sin lograr la habilitación pese a contar con máquinas de PCR, especialistas en la realización de estos test, y toda la infraestructura necesaria para realizar, al menos, entre 15.000 y 20.000 test diarios.

El muy reciente 24 de abril, el Gobierno comunicaba la habilitación de 11 nuevos laboratorios instalados en centros de investigación y universidades para hacer test PCR. Con ello se alcanzaba la cifra de 24 centros habilitados, con capacidad para hacer más de 5.000 pruebas diagnósticas al día.

El paso lo daba el Instituto de Salud Carlos III, en coordinación con el Ministerio de Ciencia e Innovación. Y, de ese modo, abría las puertas a centros como el de la Universidad de Alcalá de Henares, el Centro de Investigación en Sanidad Animal (CISA); la Universidad Complutense de Madrid, el Centro Militar Veterinario de Madrid, el Laboratorio de Identificación Rápida (LABIR) de la Unidad Militar de Emergencias (UME), el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) y otros tantos.

Pero siguen sin habilitarse la mayoría de los 350 centros-laboratorios que ofrecieron un 17 de marzo. Un total de 350 instalaciones entre las que se encontraban los centros de la red de centros SOMMa (25 centros de investigación y 23 unidades universitarias) y la CRUE (rectores de las universidades españolas, con sus 76 campus).

Entre todos los centros mencionados suman más de 350 laboratorios con máquinas de análisis PCR. Y todas esas instituciones juntas eran capaces de incrementar el número de test, desde el primer día. Y los test son y han sido, precisamente, nuestro gran punto débil en el control de la escalada y letalidad del coronavirus.

Todos ellos eran capaces de ampliar, además, los test más fiables: los PCR. El ofrecimiento fue plasmado, entre otros, por la red de Centros Severo Ochoa y las Unidades María de Maeztu, el 17 marzo de 2020.

Mortalidad

Ese arsenal habría permitido, con bastante probabilidad, llegar a duplicar la capacidad de realizar test en aquellas fechas: los momentos iniciales de la escalada de la mortalidad.

Pero el ofrecimiento no fue atendido de inmediato por el Gobierno ni mucho menos. Y sólo en los últimos as se ha tenido en cuenta, y muy parcialmente, ese ofrecimiento de colaboración.

Hoy sabemos que esa parcialidad es tal que ha desaprovechado más del 75% del potencial de test PCR que incluía el ofrecimiento. El ofrecimiento se hizo en su día al Ministerio de SanidadISCIII Ministerio de Ciencia e incluía la red de Centros SOMMa (25 centros de investigación y 23 unidades universitarias).

Una mano tendida que se sumaba a la de la CRUE Universidades españolas (con 76 universidades españolas, 50 públicas y 26 privadas, instituciones que acumulan más de 300 laboratorios).

Todo aquello ocurría un 17 de marzo, justo después de la manifestación feminista del 8-M y mientras se confirmaba la temeridad del Gobierno de haber permitido esa y otras movilizaciones, cuando el coronavirus ya se había colado con claridad en España.