España
'SE ACABÓ LA FIESTA'

El eurodiputado Solier, de Se Acabó la Fiesta, denuncia al ‘faker’ Alvise por acoso, injurias y amenazas

Alvise Pérez publicó un podcast en el que instaba a su comunidad a "buscar, localizar e identificar" a Solier y Nora Junco

Solier manifiesta especial preocupación no solo por su propia seguridad, sino también por la de su mujer e hijos

El ‘faker a sueldo’ Alvise amenaza a su eurodiputado Solier: «Te apisonaremos la cabeza e iremos a por ti»

El eurodiputado de Se Acabó La Fiesta (SALF), Diego Adrián Solier, ha presentado una denuncia formal contra el faker a sueldo Luis Pérez Hernández, conocido públicamente como Alvise Pérez, por presuntos delitos de acoso, injurias y amenazas. En la denuncia, a la que OKDIARIO ha tenido acceso, Solier manifiesta especial preocupación no sólo por su propia seguridad, sino también por la de su mujer e hijos, debido al carácter matonil de las publicaciones de Alvise. Según declara, conserva capturas de pantalla de todas las publicaciones como prueba para posibles actuaciones judiciales.

La denuncia fue formalizada el 24 de abril de 2025 ante la Guardia Civil en Bétera (Valencia). Según consta en la diligencia, el origen del conflicto se remonta al 21 de abril de 2025, cuando Alvise Pérez publicó un podcast en el que instaba a su comunidad a «buscar, localizar e identificar» tanto a Solier como a su compañera eurodiputada Nora Junco.

En dicha publicación, Alvise utilizó expresiones como «ver quiénes son, perseguirles y pedirles explicaciones», «las ardillas respetamos a las ardillas» y «te apisonaremos la cabeza e iremos a por ti».

Escalada de acoso

La denuncia detalla que, tras estas primeras publicaciones, Solier comenzó a recibir numerosos mensajes privados en sus perfiles de Instagram y X (anteriormente Twitter), donde era calificado como «traidor, hijo de puta sicario, Judas Iscariote», acumulando aproximadamente 30 mensajes de este tipo.

El documento señala que el 23 de abril de 2025, Alvise Pérez realizó una nueva publicación en su canal de Telegram, donde cuenta con más de 683.000 seguidores. En esta publicación, Alvise compartió varias fotografías reconocibles del denunciante junto con comentarios que, según la denuncia, incitaban nuevamente al acoso, utilizando a Solier como «ejemplo de lo que ocurre a la gente que sin ser votada por nadie se aprovecha de un acta para traicionar al votante».

Consecuencias del acoso

Como resultado de estas publicaciones, Solier afirma haber sufrido una avalancha de comunicaciones no deseadas: aproximadamente 115 correos electrónicos, unas 90 llamadas telefónicas y alrededor de 100 comentarios o publicaciones en sus perfiles de Instagram y X.

Estos mensajes contenían insultos como «rata, hijo de puta, dimite, vendido, caradura, traidor», llegando algunos a alcanzar un tono amenazante como «hijo de puta vamos a por ti, te vamos a pillar». Esta situación obligó al eurodiputado a cerrar sus redes sociales y bloquear llamadas de números desconocidos.

Ante preguntas específicas de los agentes, el eurodiputado indicó que no ha habido amenazas directas a su entorno o familia. Asimismo, declaró que no puede determinar si teme por su vida o integridad física al desconocer la identidad de quienes lo amenazan. Solier también manifestó que no ha mantenido comunicación con Alvise Pérez desde diciembre del año anterior y que no tiene constancia de que el Parlamento Europeo haya tomado medidas contra estas conductas.

El conflicto surgió por discrepancias sobre el voto para el rearme de la Unión Europea. Con un tono prepotente y agresivo, Pérez exigió la dimisión de Solier por votar a favor de esta iniciativa. La negativa del eurodiputado desató la furia desmedida de Alvise, quien inició una implacable campaña de acoso y derribo a través de su canal de Telegram.

«No somos el PSOE, el PP y Vox. Nosotros vamos a ir a por ti directamente», bramó Pérez con tono amenazante, intentando disfrazar su comportamiento abusivo como una supuesta virtud frente a los partidos tradicionales. «Vamos a usar a Diego Solier como ejemplo de qué le ocurre a la gente que sin ser votado por nadie se aprovecha de un acta para traicionar al votante», escribió el agitador.