España
Pactos postelectorales

ERC y Bildu pactan su abstención para permitir la investidura de Sánchez

El blanqueamiento de EH Bildu en la televisión pública y el incremento de contactos entre el PSOE y ERC no son casuales. La estrategia de apoyo de las dos formaciones separatistas radicales (y, en el caso de EH Bildu, proetarra), ha sido pactada entre ellas y asumida por los socialistas como parte de su armazón de voto de cara a la investidura de Pedro Sánchez.

La estructura permite a los socialistas, además, un acercamiento indirecto muy cómodo de cara a la opinión pública: los socialistas no se ‘manchan’ tocando a los proetarras porque para eso ya cuentan con la coordinación a través de ERC.

Las conversaciones entre el PSOE y el portavoz de los republicanos, Gabriel Rufián, han sido continuas en las últimas semanas. Y fruto de ello, de hecho, ha surgido la confirmación prácticamente simultánea de la disponibilidad a abstenerse de ambas formaciones para facilitar la investidura de Pedro Sánchez.

El favor -que será obviamente recompensado- no es pequeño: los 15 escaños de ERC y los 4 de EH Bildu salen de la suma de voto y permiten a Pedro Sánchez una elección mucho más cómoda en una segunda vuelta de la investidura.

La postura de republicanos y proetarras supone, así mismo, un capítulo más en las vías de presión a Podemos. Y es que, si los más radicales de la izquierda son capaces de apoyar a Sánchez, los argumentos de Pablo Iglesias para bloquear un Gobierno del PSOE se debilitan de forma clara.

Desde ERC no se ocultan los contactos con el PSOE de cara a la elección del próximo presidente del Gobierno. Es más, desde las filas socialistas se admite ya que ERC y EH Bildu funcionarán con una clara estrategia coordinada.

Los socialistas han dado orden de no mantener ningún tipo de contacto con EH Bildu. Pero lo cierto es que manteniendo la vía de contacto con ERC mantiene una coordinación indirecta con la formación de Arnaldo Otegi.

Y los movimientos de apoyo de Bildu están surgiendo ya de forma clara. Así ha ocurrido en Navarra, donde la abstención de los proetarras es necesaria para que gobierne la socialista María Chivite con el apoyo de Geroa Bai (marca que lleva dentro al PNV). Y de la misma manera se prepara el camino para que ocurra lo mismo en el Congreso de los Diputados con el respaldo a Pedro Sánchez por medio de la abstención.

Beneficios para ERC y Bildu

Los premios a ambas formaciones son variados. En el caso de EH Bildu se encuentra en la mesa el acercamiento de los presos etarras y la dotación de competencias plenas al País Vasco para poder acelerar la salida de las cárceles de los miembros de la banda terrorista. Además, Bildu ha exigido el respaldo a una norma navarra -el Mapa Local- que permitirá a los de Otegi tener un mayor control municipal por medio de una reforma administrativa de toda Navarra y la creación de 15 comarcas con fuerte control de Bildu.

En el caso de ERC, se ha pactado ya una transformación de la Justicia para dar a los jueces catalanes más control sobre los presos. La reforma exige, de hecho, el blanqueamiento de parte de los artículos del Estatuto Catalán tumbados por el Constitucional. Y también se ha pactado ya la reforma de la Ley Orgánica General Penitenciaria con el mismo fin: acelerar los beneficios penitenciarios. Todo ello de cara a un pseudo indulto camuflado de los presos golpistas.