España
CRISIS DEL CORONAVIRUS

Ellas sí lo vieron venir: tres infectólogas ‘top’ escribieron a Simón el 2-M para «prohibir aglomeraciones»

Tres infectólogas españolas de primer nivel vieron venir la que se avecinaba. Habían seguido de cerca el comportamiento del coronavirus, con una alta transmisibilidad y efectos severos, y no podían entender por qué en España «no estaban haciendo nada» los responsables del Ministerio de Sanidad. Por ello, la epidemióloga N. N., que trabaja ahora en la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Suiza, alertó a través de un correo electrónico enviado el 2 de marzo al director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón –a quien «conocía personalmente»– para que «prohibiera las aglomeraciones», hecho que no se produjo y que provocó que las marchas multitudinarias del 8 de marzo dispararan los contagios.

Este email, remitido a título particular, estaba firmado por otras dos sanitarias: M. V., epidemióloga en el Swiss Tropical and Public Health Institute (STPH) de Basilea (Suiza), y M. C. neuróloga especializada en el control de infecciones en trasplantes.

El escrito, al que ha tenido acceso OKDIARIO y cuya autoría ha podido certificar, estaba dirigido a Fernando Simón como responsable del CCAES y a la socialista Pilar Aparicio, directora de Salud Pública y alto cargo del Ministerio de Salvador Illa. Las tres ‘colegas’ de profesión aseguraban en la carta que «asistían impotentes al desarrollo de esta epidemia en Europa» y se mostraban preocupadas de que en España «no se hubieran adoptado medidas suficientemente enérgicas que ya son efectivas en otros países».

«Opinamos que es el momento de introducir otras medidas que disminuyan el contacto físico entre personas como prohibir aglomeraciones, fomentar el teletrabajo, recomendar evitar el saludo con besos y mano, etc. Aunque probablemente sean insuficientes para evitar la propagación del virus, es lógico esperar que estas medidas sí ralenticen su expansión. La experiencia de China ilustra muy bien la necesidad de medidas drásticas y excepcionales y la importancia de ganar tiempo para evitar la saturación de los sistemas de salud», suscribía la epidemióloga N. N.

«Aunque probablemente sean insuficientes para evitar la propagación del virus, es lógico esperar que estas medidas sí ralenticen su expansión», advertían las expertas

En cambio, el doctor Fernando Simón, elegido por el Gobierno de Pedro Sánchez para convertirse en aquel momento en la cara visible del Ejecutivo frente a la crisis sanitaria, rebajó entonces los riesgos. Incluso llegó a decir que si su hijo le preguntaba si podía asistir a la manifestación del 8-M, él le aconsejaría que «hiciera lo que quisiera». Ello, cuando el virus ya estaba desbocado en la región.

El 2 de marzo, el mismo día en el que las tres infectólogas contactaron con Simón, la agencia de la Unión Europea para el Control y la Prevención de enfermedades (ECDC) emitió un informe en el que reclamaba a los Estados miembros «evitar» que la población acudiese a «actos multitudinarios» e impedir «concentraciones masivas innecesarias» por el Covid-19. Sin embargo, el Gobierno desoyó todas las recomendaciones. Además, las expertas ni siquiera recibieron respuesta, según ha podido confirmar OKDIARIO.

«Transparencia»

Ante la falta de información que se estaba ofreciendo a la población en la semana previa a las manifestaciones masivas por el Día de la Mujer, estas tres infectólogas españolas reclamaban mensajes claros del Ministerio de Sanidad: «La falta de este tipo de respuestas contribuye también de forma significativa al sentimiento de inseguridad y al alarmismo en la población, sentimiento que está creciendo a medida que va aumentando el número de nuevos casos. La población necesita información concreta sobre qué tipo de planificación se está llevando a cabo para poder hacer frente al exceso de enfermos», apuntaban.

Además, se preguntaban: «¿Existe suficiente capacidad de diagnóstico y tratamiento? ¿Qué tipo de medidas de protección y formación se están tomando para el personal sanitario?» Y añadían: «Estas son cuestiones claves que nos gustaría se abordasen con más detalle en los medios de comunicación. El sentimiento de transparencia aumenta la confianza de la población en las instituciones y fomenta la colaboración efectiva entre las dos partes».

Después de estos meses de pandemia, se ha constatado que no existía ningún plan y que Sanidad no adoptó suficientes medidas como las reclamadas por estas expertas, según explican las fuentes consultadas por este periódico. Esa es la razón por la que no daba la información necesario a los ciudadanos, añaden las mismas fuentes.

«Incomprensión»

La carta de las infectólogas concluye ofreciendo su apoyo al CCAES «conscientes de la complejidad en la gestión de esta crisis sin precedentes», a la vez que deseaban «lo mejor» a sus compañeros. Estas expertas enviaron el email a título particular con la intención de ayudar «en la medida de sus posibilidades», y alertar a las autoridades sanitarias porque «es la única forma que tenían de expresar la incomprensión que sentían en cuanto a la posición de España en algunas cuestiones, especialmente desde que diferían de la respuesta de países vecinos en situación similar».

Esta semana, la juez Mónica Aguirre ha reactivado la querella interpuesta por la Asociación de Consumidores y Usuarios contra Fernando Simón, Pilar Aparicio y el secretario general del Ministerio de Sanidad, Faustino Blanco, por un presunto delito de imprudencia temeraria. En España son más de 40.000 los fallecidos por el Covid-19.