El Departamento de Seguridad Nacional alerta de que los incendios se han duplicado en un año
El doble de incendios y un 500% más de superficie quemada respecto a los registros de 2018
El incendio de Artenara (Gran Canaria) sigue sin control y ha quemado ya más de 1.000 hectáreas
Los datos de incendios forestales que maneja el Departamento de Seguridad Nacional (DSN) no animan al optimismo. El número de quemas descontroladas se ha duplicado respecto a 2018 y la superficie arrasada se ha multiplicado por cinco. Las cifras de esta campaña están muy por encima de la media de la última década.
El Departamento de Seguridad Nacional, dependiente del Ministerio de la Presidencia, ha hecho balance de los primeros siete meses del año en materia de incendios forestales. Los resultados son objetivamente negativos.
Según los registros del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, entre el 1 de enero y el 21 de julio se han registrado un total de 7.483 incendios en todo el territorio español. En el mismo periodo de 2018 se habían contabilizado 3.470, menos de la mitad.
Más superficie quemada
Pero no sólo ha habido más incendios, sino que el fuego ha arrasado mucha más superficie natural. En total, se han visto afectadas 53.119 hectáreas forestales, cinco veces más que las 10.984 hectáreas arrasadas en 2018.
Estas cifras no sólo son superiores a 2018. También están por encima de los registros de los últimos diez años. De media en la última década se han quemado unas 45.600 hectáreas y se han contabilizado anualmente unos 6.741 focos de incendios. Los datos actuales apuntan a que 2019 batirá los récords estadísticos.
Además, del total de incendios declarados hay nueve de ellos que pueden considerarse “grandes incendios”. Es decir, aquellos cuya superficie afectada supera las 500 hectáreas (a modo comparativo, medio centenar de campos de fútbol). En 2019 sólo se registró un incendio de este tipo, mientras que la media de la década se sitúa en 6.
Aumentan las detenciones
Por otra parte, el Departamento de Seguridad Nacional refleja el hecho de que las detenciones de individuos relacionados con el origen de los fuegos han aumentado un 90%. En lo que va de año se ha investigado a 178 personas frente a las 95 del año pasado.
“Con los datos de los 15 últimos años queda patente que la mayoría de los incendios forestales se encuentran vinculados al factor humano, ya sea por obra de un incendiario o derivada de la negligencia en el uso del fuego, siendo muy pequeña o casi nula la incidencia de las causas naturales. De los siniestros conocidos por la Guardia Civil en los primeros seis meses de este año 2019, el factor humano estuvo detrás de más del 98% del total”, destaca el DSN.