Colau traspasa al PSC la coordinación con el Estado en su pacto para gobernar Barcelona

La alcaldesa Ada Colau y el presidente del grupo municipal socialista, Jaume Collboni, han presentado esta mañana en la sede del Colegio de Periodistas el preacuerdo para ampliar el gobierno municipal. Se trata de un pacto para gobernar Barcelona que comportará la entrada del PSC en el Ayuntamiento para codirigir algunas tenencias de alcaldía y que la semana que viene se votará por las bases de ambas formaciones. En caso de aprobarse, Coll­boni será el segundo teniente de alcalde en un equipo mixto, que parte con el próposito de que en la gestión del Ayuntamiento no haya compartimentos estancos, sino un principio de “cogobernación”, según han explicado este viernes.

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ha traspasado a Collboni, entre otras áreas, la de coordinación de las relaciones con el Estado. Algo que algunos socialistas han criticado asegurando que ellos serán los que den la cara en caso de que el gobierno municipal «se le ocurra» desobedecer las órdenes del central, como está sucediendo en la Generalitat y la ley ‘antidesahucios’, por ejemplo. Pese a que algunos de sus artículos están anulados por el Tribunal Constitucional, los de Puigdemont buscan ahora la fórmula para ‘esquivar’ dicha sentencia y autorizar la Ley como la escribieron antes de estar recurrida. Los socialistas catalanes ante esto avisan a este diario de que «nos acogeremos como siempre a lo que diga la Ley y no permitiremos cosas como éstas al frente del gobierno municipal».

Además, Collboni se encargará de la coordinación de las comisiones bilaterales entre Ayuntamiento y Generalitat y su compañera Montserrat Ballarín se hará cargo de Comercio y Mercados. Laia Ortiz, que hasta el momento era segunda teniente de alcalde pasará asumir la tercera tenencia y dentro de su equipo incorpora a la socialista Carmen Andrés que será concejal de Infancia y Juventud y Personas Mayores. El socialista Daniel Mòdol ocupará las direcciónes de Patrimonio y Arquitectura.

La entrada del PSC ha acarreado a los de Colau numerosas críticas entre ellas las los concejales de Iniciativa per Catalunya, que con este acuerdo han sido desplazados en su jerarquía. También la CUP invitó a Colau a que reflexionara, ya que, según ellos, formar gobierno con los socialistas les aleja de sus posiciones de acuerdo «en muchos temas», señalaron.

Por su parte, el presidente del grupo del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni, ha asegurado que su formación «se apunta al cambio» con un pacto para incorporarse al gobierno municipal de Ada Colau que es un «buen acuerdo para Barcelona» y está «abierto» al resto de fuerzas de izquierda. «Es un buen acuerdo para Barcelona. El motivo principal de este acuerdo es la ciudad y el cambio en Barcelona. En el momento en el que estamos, podemos contribuir al bloqueo o al cambio. Nosotros nos apuntamos al cambio», ha señalado el dirigente socialista.

Collboni ha considerado que el pacto pone «Barcelona por delante de todo», especialmente «por delante de los intereses legítimos de partido y las diferencias que podamos tener», para «buscar puntos de acuerdo y no bloquear la ciudad». Pero el líder del PSC barcelonés ha dejado claro que el acuerdo entre socialistas y BComú «está abierto a las fuerzas de izquierda del Ayuntamiento» y ambas formaciones, a pesar de formar aún un gobierno en minoría, seguirán buscando el «consenso con los grupos de izquierda y el conjunto del consistorio».

Asimismo, Collboni ha asegurado que tanto la dirección del PSC como la del PSOE han sido informados de los avances de este acuerdo en todo momento, que en todo caso no es un pacto «contra nadie fuera o dentro de Barcelona». «Que nadie haga interpretaciones torticeras de este acuerdo. Pedro Sánchez tiene todo mi apoyo», ha aseverado