Colau presta a PSOE y ERC un local en las afueras de Barcelona para que celebren su tercer encuentro

En la Zona Franca. A unos diez kilómetros del centro de Barcelona. Entre el puerto de mercancías y Mercabarna. Y cerca de L’Hospitalet de Llobregat, feudo del PSC. En unas instalaciones que albergan el órgano de gobierno de una de las instituciones más opacas y controvertidas, el Área Metropolitana de Barcelona (AMB), presidida por la alcaldesa Ada Colau, se reunirán hoy los equipos negociadores del PSOE y Esquerra Republicana.
Como ya avanzó ayer OKDIARIO,e el lugar de esta tercera reunión, la primera que se celebra en Barcelona, era objeto de discusión entre las dos formaciones. Buscaban un lugar neutro, sin connotaciones políticas. Y ese lugar es la sede de la AMB, muy cerca del Consorci de la Zona Franca, donde se reunieron ayer en secreto. Se trata de un organismo donde están representados todos los ayuntamientos comprendidos en el área metropolitana barcelonesa. A pesar de eso, debido también al resultado electoral, el PSC y los Comunes de Ada Colau son los que dominan el lugar.
Las sedes de los partidos quedaron automáticamente descartadas como lugar para reunirse. También el Palau de Pedralbes, aunque en el primer momento se había puesto sobre la mesa. Que los pesos pesados del PSOE tuvieran que ir al Parlament a mendigar el voto de Esquerra tampoco parecía una opción que gustase mucho. Aún así, la cámara catalana, se guardó como última opción si no se encontraba un emplazamiento mejor.
Adriana Lastra, José Luís Ábalos y Salvador Illa se sentarán en el lado de la mesa socialista. Gabriel Rufián, Marta Vilalta y Josep Maria Jover, en el lado independentista. Sobre la mesa la necesidad de desbloquear cuanto antes la situación política que vive el país, con un acuerdo que permita poner fecha a la investidura del secretario general del PSOE Pedro Sánchez. Su partido quiere que sea antes de finalizar el año. ERC la prefiere en el mes de enero.
La AMB está situada en una zona industrial donde se encuentran las fábricas de importantes empresas como la Nissan, la farmacéutica Esteve o las cocheras de los transportes públicos barceloneses. También tiene su sede, a pocos metros, el controvertido centro de internamiento de extranjeros que ERC pide cerrar.