Carmena evita desvelar si ella hubiera vendido o no la VPP de Espinar

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha preferido no opinar preguntada por OKDIARIO acerca de si ella hubiera vendido la vivienda de protección pública de Ramón Espinar dando un pelotazo de 20.000 euros.

«Vosotros me conocéis y yo no hablo temas de carácter general, no soy comentarista política sino alcaldesa de Madrid y hablo de problemas de Madrid, y no solo de los problemas, sino de todo el Ayuntamiento. Sí que me gustaría que hablaseis de lo que habéis visto esta tarde que me parece apasionante», ha explicado la regidora capitalina.

La alcaldesa ha preferido en toda la campaña de las primarias de Podemos Comunidad de Madrid no mostrar ningún gesto ni guiño a la candidatura ‘errejonista’ que encabeza una de sus manos derecha en el Ayuntamiento, Rita Maestre.

De esta forma, la exjueza considera que la venta de esta vivienda protegida no es un problema de Madrid y por tanto como alcaldesa no lo tiene que comentar.

La alcaldesa de la capital ya vivió en sus carnes un problema con la compraventa de viviendas. Tal como reveló OKDIARIO, la exjueza pagó con en metálico una porción del chalet de su amiga Cristina Almeida. Dijo en el Pleno muncipal que pagó 120.000 euros en “cheques” y el notario dijo en 2009 que fue “en metálico”.

Carmena no ha opinado y ha esquivado esta cuestión desde que se destapara la semana pasada. Preguntada por OKDIARIO este martes ha desviado la atención sobre el evento que había tenido lugar minutos antes en el que grupos de estudiantes de Madrid han escenificado problemas de convivencia por acoso resueltos con mediación.

Propone una escuela de mediación

Carmena, ha sugerido la posibilidad de poner en marcha una escuela de verano de mediación teniendo en cuenta las características de la ciudad. La de Ahora Madrid ha escuchado en los jardines de Cecilio Rodríguez en el Parque de El Retiro la experiencia de mediación escolar de tres institutos públicos de Madrid.

La alcaldesa les ha explicado que en abril el Ayuntamiento organizará un congreso mundial sobre habilidades para resolver conflictos en la sociedad sin violencia, al que están llamados alcaldes de todo el mundo. Quiere que participen en esta cumbre mundial. También ha dicho que quiere que la capital española tenga el título de «capital de la paz».

«Madrid es una ciudad poco violenta pero de vez en cuando muere algún joven aunque no debería morir ninguno», ha expuesto ante los estudiantes, lo que le ha llevado a defender la tranquilidad de la ciudad como requisito para ser anfitriona en un foro de mediación como el previsto.

A los alumnos participantes en la jornada les ha manifestado que la mediación es «un instrumento que hoy cotiza en el mundo» a través de la profesión de coach, es decir, «gente que necesita ayudar a despertar, modificar y perfilar habilidades». «Prometéis una barbaridad. Claro que el mundo puede cambiar a mejor escuchándoos», ha declarado.

Preocupación con los refugiados

La política de 72 años ha avanzado también que este miércoles llamará de nuevo a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, para conocer el estado de las gestiones para traer a la ciudad a 80 refugiados que huyen de la guerra de Siria, muchos de ellos menores enfermos que necesitan ser operados urgentemente. Una niña, dijeron, se iba a quedar ciega si no era intervenida con rapidez.

Ayer vio a la vicepresidenta pero que no le pareció adecuado hablar sobre este asunto en el simposium sobre Carlos III en El Escorial con la presencia del rey Felipe.

Semanas atrás Sáenz de Santamaría le dijo que estaban tramitando la llegada de los refugiados y que estaban recibiendo comunicación desde Atenas. «El problema es que son enfermos y queremos que sus enfermedades no se agraven, por eso mañana volveré a llamar de nuevo a la vicepresidenta porque se comprometió a que haría todo lo posible para que llegaran cuanto antes», ha remarcado Carmena.