Se abre una nueva boca en el volcán, aumenta la actividad explosiva y la última colada se dirige al mar
El volcán de Cumbre Vieja cumple este domingo dos semanas desde que entró en erupción y la actividad explosiva se ha incrementado, por lo que no se descarta la aparición de nuevos centros de emisión, tal y como se desprende del dictamen que emite diariamente el Comité Científico del Pevolca.
La responsable nacional de vigilancia volcánica del IGN, Carmen López, ha indicado en rueda de prensa que si bien la actividad del tremor es más intensa, todavía no ha llegado a la que se registró entre los días 24 y 27 de septiembre, que fue mucho más intensa que ahora.
Carmen López recordó que cuando esa actividad llegó al máximo, se produjo un parón de la actividad, pues no permitía salir más emisión, y el tremor disminuyó bruscamente y se abrió el sistema a base de una serie de explosiones violentas.
No obstante, insistió en que ahora la situación no es la misma, pues aunque el tremor es más intenso y se ha registrado actividad explosiva, no ha llegado a esos niveles tan altos. En cualquier caso, advirtió que esta alternancia de fases está dentro de lo esperable y en los próximos días podría volver a pasar.
En cuanto a la evolución de la erupción volcánica, Carmen López informó que la erupción fisural continua mostrando el mecanismo estromboliano y a la vez se detectan fases explosivas y efusivas.
La nueva colada aparecida el 1 de octubre sigue discurriendo hacia el oeste, paralelamente a la colada que llega al mar, habiendo alcanzado la colada anterior a la altura del camino de Los Campitos y observándose en las últimas horas una menor tasa de emisión en relación a días anteriores.
Además, se observan varios centros activos en el interior del cráter principal y dos situados en el sector nornoroeste del lateral del cono. También continúa el campo fumarólico extenso en el flanco nornoroeste.
Esta actividad puede desestabilizar la parte superior del cono, cuya morfología cambia de manera reiterada por los sucesivos procesos de crecimiento y reconfiguración y actualmente el cono principal es más ancho, más bajo y se encuentra cerrado.
La fajana continúa aumentando su extensión contando con cuatro puntos principales de alimentación. También continúa el penacho marino a lo largo del borde del delta de lava, produciendo nubes de vapor de agua y ácido clorhídrico que se concentran en una pequeña área alrededor del contacto.
Emisión de bombas volcánicas
El proceso productivo puede mostrar procesos de incremento y disminución de la actividad estromboliana, así como cursos de activida freatomagmática. Se han observado a lo largo del día de ayer emisiones de bombas volcánicas, un tipo de piroclasto de varios metros que alcanzaron la base del cono. La altura medida de la columna de cenizas y gases alcanza los 3 kilómetros, mostrando una parte más dispersa, que alcanza una altura de 5 kilómetros.
En relación al tiempo, el predominio del viento de componente norte en los niveles medios y bajos de la troposfera situará la nube de ceniza y dióxido de azufre hacia el sur del foco eruptivo, y la zona más afectada por la caída de ceniza será la vertiente sur de la isla.
Esta configuración podría provocar la llegada de ceniza fina a la isla de El Hierro y en la vertiente oeste, en las zonas próximas a la erupción y a las zonas de colada, el régimen de viento predominante serán las brisas. La presencia de una marcada inversión térmica, unido al régimen de vientos predominantes en la vertiente oeste, son condiciones meteorológicas que se consideran desfavorables desde el punto de vista de la calidad del aire.
La sismicidad continúa localizándose cerca de la sismicidad de los primeros días, a profundidades entre los 10-15 km. Se registran además terremotos situados a profundidades superiores a los 20 km. En las últimas 24 horas se han localizado algunas decenas de sismos, el mayor de 3.6 de magnitud, que ha sido sentido con intensidad III.
Valores altos
La emisión de dióxido de azufre asociado al penacho volcánico continúa registrando valores relativamente altos y acordes al proceso, alcanzado valores de 3.401 toneladas diarias. La emisión de estos gases se está volviendo más rico en azufre y más pobre en carbono a lo largo del tiempo, reflejando la emisión de magma más desgasificado desde un conducto poco profundo. La emisión difusa asociado a la dorsal de Cumbre Vieja ha alcanzado valores de 1.813 toneladas diarias, y la emisión de gases no visibles no representa un peligro para la población.
Durante el día de ayer se han mantenido estables, reduciendo de forma paulatina los valores medidos de dióxido de azufre en las estaciones de Tazacorte, Los Llanos y El Paso, hasta los valores actuales que se encuentran por debajo de 20 microgramos/m3. En el resto de las estaciones de la isla, los valores siguen siendo bajos.
La última colada se dirige al mar
La lava que emerge de los dos últimos puntos emisores de la erupción volcánica de Cumbre Vieja discurre como una sola colada y tras contactar con la primera que se originó hace quince días, ahora discurre de forma paralela con la que termina en el mar, donde ya ha creado una superficie de 28 hectáreas.
La inversión térmica que afecta estos días a la isla y los vientos predominantes son desfavorables para la calidad del aire y el volcán emite 3.813 toneladas de gases mientras que las partículas menores de 10 micras se han detectado en todas las estaciones de la isla, y con mayor intensidad en las cercanas al volcán.
Hay 30,7 kilómetros de carreteras inutilizadas y las edificaciones destruidas son, de acuerdo al último dato de Copernicus, 946 mientras que otras 128 están dañadas o en riesgo.