Economía
Opinión

Wall Street: ¿brotes verdes?

“Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia”, Albert Einstein.

Nos adentramos en el que probablemente sea el peor invierno de nuestra generación, provocado por la escasez de energía como consecuencia de esta maldita y absurda guerra en Ucrania que una vez más nos sorprende con noticias francamente surrealistas, como la de que en Francia habrá cortes selectivos para ahorrar energía. Pero el crudo invierno que se avecina en Europa, poco tiene que envidiar a las dantescas imágenes que llegan desde China, en las que sus ciudadanos deben hacer cola diaria para obtener una licencia para ser libres… y es que la política de COVID-0 de China empieza a asustarme. Y yo me pregunto, ¿es un error de cálculo del régimen chino, o las autoridades sanitarias saben algo del virus que nosotros desconocemos? Lo que está claro es que el mundo siempre ha luchado a lo largo de la historia de las civilizaciones por la libertad y es obvio que el régimen de Xi, está haciendo perder la paciencia a un país que ansía como nadie sus libertades. Muchos ya apuntan que morir de suicidio es peor que aprender a convivir gripalizando el COVID, duras declaraciones en mi opinión.

Ante estas noticias que me ponen los pelos de punta, la gente de a pie no logra comprender todavía a qué se debe este ruido de la crisis, si todo sigue como siempre. Pero lo que la mayoría ni sabe ni comprende, es que los mercados financieros son indicadores adelantados de la economía, y el endurecimiento de las políticas monetarias de los bancos centrales (en especial la FED), ya está causando estragos. El mercado de la vivienda en USA se ha desplomado a la misma velocidad que la FED ha subido los tipos de interés, dejando ya el mercado de renta fija y el mercado de deuda en niveles que hacía muchos años que no se veían, y claro, ante estos indicadores el efecto riqueza y el IPC empiezan a causar estruendos en la economía, pero que todavía no se hacen notar en el mercado laboral. Así cerraron las bolsas el pasado viernes, con recortes intradiarios intensos, para recordarnos que cuanto peor, mejor. Y que por otro lado, el hecho de que los mercados reaccionaran de manera negativa al muy buen dato del mercado laboral, explica nuevamente que más allá de dichos buenos datos, lo que impulsa a las bolsas es, como siempre, la maravillosa liquidez.

Y la pregunta que ahora me hago, tras el fuerte rebote técnico que viene liderando Europa sobre la renta variable, es; – ¿ha terminado ya el mercado bajista? Es pronto todavía para hablar de ello, pero como les he venido comentando y exponiendo durante estas últimas semanas, Mr. Market ha roto su espiral bajista, completando así una pauta impulsiva alcista, que me permite considerar que tras el próximo ajuste del mercado podamos acontecer por vez primera un patrón técnico en confirmación, que por teoría de DOW quedaría a merced del NASDAQ100 para poder afirmar definitivamente que todo el mercado confirma una nueva tendencia alcista. Así lo hemos operado en Blackbird Bank, incrementando nuestra exposición operativa hasta el 82% en las últimas semanas y manteniendo cierta cautela a corto plazo, esperando un ajuste del mercado para entrar decididamente en renta variable, buscando al menos la vuelta al origen del movimiento, o lo que es lo mismo, buscando los máximos anuales vividos en febrero de 2022. Y ustedes, ¿de qué lado apostarían?

Les cuento que los motivos que me hacen calibrar especialmente esta opción, no se deben simplemente a tratar de anticipar una señal en confirmación de la teoría de Dow, lo consideramos tras comprobar un nivel extremo de pesimismo en los mercados de activos, un diferencial entre retornos entre renta fija y renta variable nunca antes vistos, la capitulación del mercado de renta fija, el evidente y mostrado pico de inflación, las tensiones geopolíticas y las noticias sociales que se vienen amontonando seguido del crash de la burbuja de la disrupción, la caída de los cripto activos con un desplome del 80%, con quiebras y estafas destapadas y una FED que esta semana ha dado un claro mensaje que es si más no esperanzador. Y es que de la misma manera que en septiembre algunos miembros de la FED advertían que no les gustaba la recuperación de las bolsas, Mr. Jerome Powell exponía este miércoles que llegaba la hora de moderar la subida de tipos, dando esperanzas al mercado de que este mismo diciembre la subida pasará al 0,50% en lugar del 0,75%, una noticia que aupó a los alcistas y dio manga ancha para pensar que ahora la FED quiere las bolsas arriba. Y es que el desenlace acerca de que esta recesión sea suave o termine como el rosario de la aurora, depende en parte si no en todo, de la capacidad que tenga nuestra querida FED de mantener las renta variable en pie, ahora que vivienda y bono, ¡están hundidos! Dicho todo lo cual, ¿les cuento algo? El efecto riqueza que la FED ha vigilado desde 2.009 es sin duda el principal argumento alcista que manejamos en Blackbird en estos momentos. No pierdan el foco, ante nada o pese a todo.

He aprendido que cuando una sociedad o cultura entra en crisis, la civilización, es decir, el principio de utilidad, genera cierto sentimiento de pánico en el alma humana, y entonces empieza la preocupación por medir el tiempo con una exactitud extrema. Tan extrema como desgastante, tanto que olvidamos a veces que todas las situaciones críticas tienen un relámpago que nos ciega o nos ilumina. Pero generalmente sin crisis no hay méritos, puesto que es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno. Sin crisis todo viento es caricia señores, e interiorizar que las malas noticias abanderan el suelo del peor escenario, es sin duda un entorno propicio para que los mejores traders no solamente deban liderar, sino disfrutar de él.

Si hubiera una sola persona perfectamente informada nunca se produciría una crisis general. Las crisis pulen tu vida. En ellas descubres lo que realmente eres, y desarrollas el reto de aprender a mejorar enfrentando las adversidades más inimaginables. Pero de la crisis actual, sólo puedo decirles que para mí, muchísima gente se ha vuelto pesimista por haber financiado a ineptos optimistas.

Gisela Turazzini, Blackbird Bank Owner Founder CEO