Economía
POLÍTICA MONETARIA

Tregua en la FED: mantiene los tipos de interés en el 5,25% y da un respiro a los mercados

Tregua en la FED: el banco central de Estados Unidos ha decidido este miércoles mantener los tipos de interés en el 5,25% y dar un respiro a los mercados, la mayoría favorables a una pausa en la carrera alcista del precio del dinero a fin de no causar más daño del necesario a la actividad económica y a la creación de empleo, indicadores que ya dan muestras de debilidad tras el periodo más largo de endurecimiento monetario de la reciente historia.

La decisión de la Reserva Federal, sin embargo, no da por cerradas definitivamente futuras subidas de tipos de interés. Su presidente, Jerome Powell, ha dejado claro que seguirá haciendo lo posible para reconducir la inflación hacia el objetivo del 2%, y que se tomará un tiempo hasta ver los efectos del rigor aplicado sobre la evolución de los precios sin desatender por completo su impacto en la coyuntura económica y la evolución del empleo, que son igualmente objetivos fundacionales del banco central americano.

El banco central con sede en Washington también ha actualizado sus previsiones económicas, en general a la baja. El crecimiento del PIB será este año del 2,1%, descenderá hasta el 1,5% en 2024 y se recuperará ligeramente hasta el 1,8% en 2025. En lo que respecta a la inflación, estima un 3,3% en el presente ejercicio, un descenso hasta el 2,5% en 2024 y una nueva caída hasta el 2,2% en 2025. La institución es más pesimista en lo que respecta al desempleo, ya que pronostica que la tasa de paro subirá desde el 3,8% de 2023 hasta el 4,1% de los dos años siguientes.

La mayoría de los inversores cree que la FED ha acertado y que el impacto del rumbo elegido por la FED son evidentes. Entre ellos se encuentra la caída reiterada del dinero en circulación en Estados Unidos, que es un aviso adelantado de una posible recesión y refleja una intensa contracción del crédito. Por otra parte, está la evidencia empírica de que los efectos de la política monetaria tardan hasta un año y medio en hacerse presentes, y que es de esperar que la desaceleración se profundice en el último trimestre del año, al tiempo que la inflación pierde fuelle.

Juan Carlos Ureta, presidente ejecutivo de Renta 4, considera que la decisión de la FED es la oportuna, y así se toma tiempo para comprobar todos los efectos de la política monetaria aplicada casi sin interrupción desde mediados del año pasado. Lorenzo Bernaldo de Quirós, presidente de la consultora Feemarket, cree que el banco central americano está muy preocupado por la desaceleración de la actividad económica del país y ha obrado en consecuencia.

Jack Janasiewicz, Estratega Jefe de Carteras de Natixis IM Solutions,  considera que «los datos sobre los mercados laboral y de consumo siguen siendo más firmes de lo que a algunos les gustaría, pero hay muchos indicios de que las cosas se están suavizando», afirma el experto. «Los mercados laborales siguen normalizándose y reequilibrándose, lo que presiona a la baja los salarios. Además, los avances en materia de inflación siguen en la dirección correcta».

Edificio de la Reserva Federal de EEUU (Fed).

Matthew Morgan, responsable de Renta Fija en Jupiter AM, opina que la decisión de la FED es la correcta, ya que hemos añadido más de un 5% al coste del capital para el crédito al consumo, las hipotecas y las empresas. A su juicio, las lecciones de la historia, junto con la ralentización de la inflación y algunos indicios de que el consumidor se está quedando sin dinero, significan que los bancos centrales deben hacer una pausa aquí y esperar a ver el impacto de lo que ya han hecho en lugar de arriesgarse a dañar seriamente la economía. «El gradual retroceso de la inflación subyacente y una menor tensión en el mercado laboral han proporcionado al banco central americano argumentos para no subir tipos en esta ocasión», opinan los analistas de Bankinter.

El rumbo de la política monetaria

No obstante, todo apunta a que la institución que preside Jerome Powell seguirá alerta bajo la premisa acuñada entre los banqueros centrales de todo el mundo reunidos el pasado mes de agosto en Jackson Hole de que «no subir los tipos lo suficiente sería en error peor que subirlos demasiado, porque éste último podemos corregirlo».  Una vez conocido el movimiento de la FED en la noche del miércoles en Washington, la pregunta que se hacen los inversores es cuándo se puede producir una reversión, de manera que los tipos de interés comiencen a bajar.

La respuesta es que tanto la FED como el Banco Central Europeo piensan que un cambio de esta naturaleza llevará su tiempo, y que los tipos de interés seguirán elevados durante un buen bastantes meses hasta comprobar que se va consiguiendo fehacientemente el objetivo de reducir la inflación al 2%.