Sabadell desmiente a Torres (BBVA): «Claro que es hostil, y en abril se le dijo que no presentara oferta»

Banco Sabadell ha salido al paso de las declaraciones de Carlos Torres en la presentación de resultados de BBVA, en la que, entre otras cosas, ha asegurado «que la OPA hostil no era hostil, porque se estaba negociando con anterioridad», y que fue «a raíz de una filtración», por motivos «políticos», que todo se torció. Fuentes consultadas por OKDIARIO muy próximas al Banco Sabadell afirman que esto está lejos de ser cierto: «Ya en abril», afirman, «Torres sabía» que no tenía que «presentar ninguna oferta».

Carlos Torres y josep Oliu hace tiempo que tratan de dar al Gobierno razones para inclinar la balanza cada uno hacia su lado de la OPA. Pero lo que está claro que es no es una operación amistosa. Sabadell deja claro una y otra vez, casi en cada intervención de sus responsables en público, que «es una OPA hostil» y que «los accionistas ganarían más si el banco continúa en solitario». Y lo han vuelto a reiterar.

El relato de Carlos Torres asegurando que había una negociación con Oliu y que «tras la filtración, con motivo de las elecciones catalanas, todo se torció», ha sido desmentido por la propia entidad con sede en Cataluña. Según las citadas fuentes, «Torres sabía perfectamente que Sabadell no quería trabajar con ninguna oferta».

Lo curioso, además, ha sido el manejo de un relato por parte de Torres hoy mismo, en la que el máximo dirigente de BBVA aseguraba que las elecciones influyeron en la decisión de Sabadell y, al ser repreguntado por ello, dijo que «no» quería «entrar en política».

Hay que recordar que la OPA sigue adelante, y está en manos de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia -CNMC-, que va a imponer unas duras condiciones a BBVA para que la operación pueda llevarse a cabo.

Hoy mismo contamos en este diario que la CNMC aprobará la operación, pero con unas restricciones muy complicadas de asumir para Carlos Torres y el BBVA, porque obligará a renunciar a buena parte de la operativa de Sabadell. La operación no será rentable, y ahí se medirá la voluntad real de Carlos Torres y su capacidad para convencer a los accionistas pese a todo. Una capacidad que se enfrentará, de nuevo, con la de Josep Oliu, que ya ha demostrado en anteriores ocasiones que es capaz de rechazar una OPA y sacar después el banco adelante. En este sentido, Torres tiene más que demostrar.

Las ‘sedes’ en Cataluña

La decisión del Banco Sabadell de volver a situar su sede social en Cataluña fue un gesto hacia el Gobierno que tuvo una reacción inmediata por parte del equipo de Torres en BBVA. Prometió al Ejecutivo que su banco mantendrá una co-sede operativa en Cataluña si la OPA sale adelante y el Ejecutivo autoriza la posterior fusión de ambas entidades. Sobre este asunto, por cierto, el propio Torres tampoco ha dado detalles en la presentación de resultados, limitándose a un escueto: «El equipo trabaja en ello».

Esta sede no sería la social, porque no puede ni quiere moverla de Bilbao, ni será la operativa situada en Madrid, ni la de coordinación internacional de Málaga… se hace difícil con ese escenario imaginar una nueva sede que convenza al Gobierno frente al movimiento de Sabadell, del que ha salido reforzado el líder del PSC y presidente en Cataluña, Salvador Illa.

La improvisación está siendo la tónica en algunas propuestas mientras se espera el dictamen de la CNMC y, entre tanto, el Gobierno, que se había ido poniendo de perfil, ha vuelto a pronunciarse en contra de una operación que podría suponer «problemas de competencia».

El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha reiterado este miércoles, 29 de enero, los argumentos con los que justifica su rechazo a la oferta pública de adquisición de BBVA sobre Banco Sabadell por los «posibles problemas de competencia», inclusión financiera y presencia territorial, algo que sucede justo después del regreso de Sabadell a Cataluña, lo que, en cierto modo, ha permitido que el Gobierno socialista cumpla parcialmente con el pacto de investidura con Junts.