¿Quiere montar una empresa? Hágalo en Londres pero sin levantarse del sillón

En tiempos de Fernando VII muchos liberales españoles, como Blanco White, marcharon a Londres huyendo del absolutismo. En época de Felipe VI la capital británica sigue siendo una opción para quienes buscan mayor libertad, en este caso para montar una empresa. No hablamos de grandes empresarios que buscan triunfar en La City. Nos referimos, al contrario, a emprendedores que quieren poner en marcha pequeños negocios para ofrecer sus servicios y productos en España.

Quienes transitan la vía tradicional para crear una empresa en España pasan por un auténtico calvario que requiere tiempo y dinero. Los trámites ante diferentes administraciones llevan cerca de un mes y pueden suponer un coste de 550 euros. A ello hay que sumar un capital social inicial de al menos 3.000 euros. Optar por el British Way of Business resulta mucho más rápido y barato. Además es perfectamente legal y se puede hacer sin levantarse del sofá de casa, aunque se viva en Madrid o Incinillas (localidad burgalesa de 30 habitantes).

Si uno quiere gastar algo de tiempo y un poco más del dinero necesario, siempre puede optar por comprar un billete de ida y vuelta a la capital británica. Una vez ahí, visitar un centro de negocios para alquilar una oficina virtual y después “pelearse” con algún funcionario para realizar algún trámite rápido. Pero hay vía más veloces que se pueden transitar por internet.

Quien decida hacerlo todo por su cuenta, puede registrar online su empresa LTD (similar a una sociedad limitada española) en una web del Gobierno británico. El precio del servicio es de 15 libras (20,50 euros), que pueden pagarse con tarjeta o a través de PayPal, y el registro tarda en confirmarse en torno a 25 horas. Previamente, eso sí habrá que haber contratado una oficina virtual (algo totalmente legal) que aporte una dirección física en un centro de negocios londinense. Los hay a precios muy aceptables, como 45 libras (61,5 euros) el trimestre o 92,5 libras (126,50 euros) anuales.

Sin embargo, como se haría a la hora de constituir la empresa, lo mejor suele ser recurrir a una gestoría u otras empresas especializadas. En internet se pueden encontrar muchas compañías españolas que se encargan de estas gestiones y ofrecen algún servicio extra. Su precio se sitúa en torno a los 800 euros anuales. Pero acudiendo, también online, a Inglaterra, se encuentran opciones mucho más baratas.

Company Formation es, por ejemplo, una opción simple y barata. Lo primero que debe hacer el emprendedor es buscar si el nombre elegido para su empresa está disponible. Para ello tan sólo tiene que introducirlo en un buscador disponible en la página de inicio.

Cuando se confirma la disponibilidad, debe elegirse uno de los cinco paquetes que ofrece la empresa. El más popular es el Privacy Package, que cuesta 49,99 libras más VAT (equivalente al IVA). Como el resto de ofertas, incluye servicios como 50 libras en una cuenta bancaria británica al nombre de la empresa, un dominio web .co.uk o un gestor de la empresa a través de internet.  La ventaja sobre otras otros paquetes más económicos es que incluye la oficina virtual en Londres durante un año y garantiza la confidencialidad de la dirección privada del emprendedor.

Si se quiere, por 1,99 libras más se incluye una protección antifraude adicional. Aceptándola, el precio total a pagar (impuestos incluidos) es de 59,78 libras (Unos 82 euros). Sólo falta aportar un correo electrónico para recibir los datos de la compañía y hacer el correspondiente pago con tarjeta de crédito. En pocas horas, el emprendedor internauta ya será empresario, habiendo aportado una cantidad pequeña de dinero y gastando menos de un cuarto de hora en las gestiones.

La vía británica ha perdido, eso sí, uno de los atractivos que tenía antes y que podía molestar a quienes exigen empresarios patriotas. Tras recientes reformas legislativas, el IVA se factura en el país donde se ha comprado el bien o servicio (salvo si las ventas anuales en dicho Estado miembro se sitúan por debajo del mínimo establecido, que en España es de 35.000 euros). Esta gestión del IVA transfronterizo resulta especialmente sencilla tras la puesta en marcha de la Ventanilla Única creada por la Unión Europea.

Según el sector en el que se mueva, y las aspiraciones que se tenga de captar capitales externos, crear la empresa en Reino Unido puede tener ventajas adicionales. Es el caso, por ejemplo, de la compañía online de alquiler de apartamentos para estancias cortas AlterKeys (comprada el pasado febrero por Kike Sarasola RoomMate Hotels). Su fundador, Chema González, ha explicado a Ok diario el motivo por el que optó por la capital británica como primera opción:

“De cara a fondos de inversión, es mucho más atractivo el mercado inglés que el español. Y las ayudas y subvenciones a empresas tecnológicas son muy superiores en Reino Unido, al tiempo que las trabas burocráticas son mucho menores”.