El proveedor sanitario Prim gana 3,7 millones hasta junio y aprueba el relevo en la presidencia
El Grupo Prim ha cerrado el primer semestre de 2020 con un beneficio neto de 3,7 millones de euros y un ebitda superior a 7,1 millones, lo que supone una reducción del 31,7% y del 30,1% respectivamente. Además, en cumplimiento de los acuerdos adoptados en su reunión de 7 de mayo pasado en relación con el Plan de Sucesión en la cúpula del Grupo, el Consejo ha aprobado la designación de Lucía Comenge y Jorge Prim como presidenta y vicepresidente, respectivamente, del Consejo de Administración de la compañía. Estos nombramientos se harán efectivos el próximo 7 de agosto.
Todas las partidas de la cuenta de resultados se han visto afectadas por la pandemia, ya que a raíz de la declaración del Estado de Alarma la actividad sanitaria en el país volcó todos sus recursos en atender a los enfermos de covid-19, lo que supuso la suspensión de cualquier otra actividad no crítica.
El impacto en las ventas de la compañía ha sido claro. En el conjunto del primer semestre han caído un 10,30%, frente al incremento en el primer trimestre de casi un 10%. Sin embargo, a raíz del levantamiento del Estado de Alarma, la actividad comercial del Grupo se ha recuperado hasta cerrar el mes de junio en los niveles de ingresos del mismo mes de 2019.
Idéntica evolución ha experimentado el Ebitda, que inició el año con fuertes subidas para caer en abril a su punto más bajo e iniciar la senda de recuperación en mayo y junio. Por su parte, el resultado de explotación cierra el semestre en 4,4 millones de euros (-44,49%), influido además por el incremento de los gastos correspondientes a los nuevos contratos de distribución captados por el Grupo, que deberán aportar crecimiento a futuro.
La empresa de suministros hospitalarios ha tomado una serie de medidas para tratar de mitigar el impacto del coronavirus. Entre las actuaciones destaca el fortalecimiento de la tesorería, el apoyo financiero a clientes privados y proveedores y suministradores para contribuir al mantenimiento de los servicios, la conservación del empleo y la participación en la cadena solidaria corporativa que se ha desplegado en España a través de donaciones de equipos y puesta a disposición de los hospitales tanto de instalaciones como de recursos técnicos y humanos cualificados.
Estas actuaciones no han supuesto impacto negativo en la situación financiera del Grupo ni deterioro en los activos intangibles.