Economía
La zona euro cae un 0,1% en el primer trimestre

La primera recesión en Europa desde 2020 pone en jaque más de 200.000 millones de ventas españolas

Finalmente la eurozona ha entrado en recesión. Después de que Alemania actualizara su dato de crecimiento del primer trimestre del año y elevara la caída de su economía al 0,5%, la zona euro se ha visto arrastrada y cierra el periodo enero-marzo con un descenso del 0,1%. Esto sitúa a la eurozona en recesión técnica, al caer también en el último trimestre de 2022, lo que pone en jaque más de 200.000 millones de euros de ventas de las empresas españolas a los países de la zona euro, según el Ministerio de Comercio.

Además de Alemania, países importantes de la zona como Países Bajos también han empeorado su actividad económica este primer trimestre hasta ceder un 0,7%, e Irlanda, que ha caído un 4,6% según los datos publicados este jueves por eurostat.

España ha sorteado finalmente la recesión y ha crecido a un ritmo del 0,5% en el primer trimestre, en línea con Francia e Italia, pero la entrada en recesión sobre todo de Alemania supone un grave problema para las empresas nacionales. Las ventas de los productos españoles a este país suponen unos 37.000 millones de euros al año -las fresas es un buen ejemplo- y para el conjunto de la eurozona superan los 200.000 millones anuales. Países Bajos es otro destino importante de los productos españoles. En el primer trimestre de este año se ha vendido a Holanda más de 3.500 millones y casi 1.200 millones a Irlanda.

Para la economía nacional es un lastre que importantes países de Europa estén en recesión por la bajada de las exportaciones. Las ventas al exterior son lo que ha permitido a España salvar la recesión y crecer un 0,5% en el primer trimestre, ya que el consumo interno sigue a la baja por la inflación y los primeros efectos de la subida de los tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE).

Subida de tipos

Precisamente, en los próximos días este organismo va a decidir una nueva subida de tipos y dejará el precio del dinero en el 4%, lo que contrae los préstamos a familias y empresas, y provoca la subida de las hipotecas, restando poder adquisitivo y oportunidades de consumo a los miles de hipotecados. Según los datos del primer trimestre, el consumo interno restó ocho décimas al PIB, mientras que la actividad exterior sumó 1,3 puntos.

Otro problema añadido para España es que depende del turismo, principal sector de la economía, por lo que la recesión en Alemania, Países Bajos e Irlanda restará turistas si continúa el frenazo. Además, en Estados Unidos -la Reserva Federal- ya prevén también que la economía entre en recesión a finales de este año.

De momento, la situación europea sigue en entredicho. Los datos de la actividad económica privada de mayo anuncian que el deterioro de la economía se mantiene por el frenazo en la industria. En cambio, la OCDE acaba de publicar sus estimaciones para este año y sitúa a España con un crecimiento del 2,1%, en línea con el Gobierno.